Sigue la búsqueda de dos de los tres detenidos que se fugaron de la comisaría de Campo Quijano, al pedir permiso para ir al baños.
Esta historia comenzó el 1 de mayo cuando una mujer denunció que había ingresado a robar en su hotel.
Según la declaración de la empleada del lugar, al llegar al establecimiento notó que una ventana del primer piso estaba abierta y faltaban varios electrodomésticos. La empleadora confirmó que el hotel no cuenta con cámaras de seguridad y que no se habían registrado daños visibles, aunque los autores del hecho habrían ingresado por una ventana a tres metros de altura.
Posteriormente, se realizaron tareas investigativas que incluyeron el análisis de publicaciones en redes sociales. En una publicación de Facebook, se detectó un anuncio de venta de un electrodoméstico simular al sustraído, lo que permitió vincular el número telefónico asociado a la cuenta con la titularidad de la línea a nombre de la madre del imputado.
Tras vigilancia en un domicilio de calle Güemes de Campo Quijano, el 6 de mayo se concretó una requisa domiciliaria voluntaria, donde se encontraron una bicicleta infantil, tres secadores de pelo, una bomba de agua, un celular utilizado para ofrecer los objetos robados y dinero en efectivo. El procedimiento se realizó en presencia de la madre del acusado y con testigos civiles.
Las versiones de los afectados es que la policía logró detener a tres implicados en caso, y fueron llevados a la comisaría de Campo Quijano. Allí mientras se realizaban los procedimientos correspondientes, los detenidos pidieron permiso para ir al baño y aprovecharon el descuido para escapar.
Los efectivos los persiguieron a pie por la plaza, donde lograron recapturar a uno de los prófugos. mientras los otros dos son todavía buscados.