Desde hace semanas, los rumores de separación venían creciendo. Lo que parecía una pareja sólida tras Gran Hermano, hoy está en pausa. Pero la confirmación no llegó por un comunicado frío: fue Daniela quien, entre lágrimas, puso en palabras el dolor que está viviendo.
“Yo lo ayudé mucho, lo acompañé en todo y siempre estuve para él. Pero a veces eso no alcanza”, confesó Celis en diálogo con Mitre Live, donde reconoció que la separación ya es un hecho. “Hoy estamos distanciados. No estamos juntos”, lanzó, visiblemente afectada por la situación.
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A este drama sentimental se le suma algo aún más delicado: sus hijas gemelas están atravesando problemas de salud y Daniela está día y noche en el hospital. “Estuvieron bajo observación médica debido a un cuadro respiratorio”, contaron.
PREOCUPACIÓN TOTAL POR LA SALUD DE SUS HIJAS
“Están internadas. Se me parte el corazón, no puedo explicar el miedo que tengo”, dijo Daniela al borde del llanto en sus redes sociales. La ex GH se mostró angustiada, agotada, y con el cuerpo puesto al 100% en la recuperación de sus hijas. A pesar del hermetismo, se supo que las nenas están en observación constante, y que si bien su estado no es crítico, necesitan cuidados especiales.
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En paralelo, Celis intenta sostener su vida laboral, sus compromisos y su imagen pública. Pero claramente está desbordada. “Todo se me vino encima. La maternidad, la salud de mis hijas, y ahora esta separación. Es mucho para una sola persona”, aseguró.
La exposición mediática no ayuda. Cada paso que da, cada palabra que dice, se convierte en noticia. Y aunque intenta proteger a sus hijas de la sobreexposición, no puede evitar que los medios estén encima de su situación sentimental.
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Por eso decidió poner un límite: “No quiero que se digan cosas que no son. Con Thiago nos respetamos mucho, y lo último que quiero es generar más escándalo en este momento”, expresó.
EL FUTURO DE DANIELA CELIS: FUERZA, MIEDO Y MATERNIDAD
Hoy Daniela está sola, pero no se victimiza. Se muestra fuerte por sus hijas y decidida a seguir adelante. En sus historias de Instagram, agradece los mensajes de apoyo y comparte frases de aliento. Pero también deja en claro que no todo es color de rosa. “Estoy aprendiendo a ser mamá en medio de una tormenta”, escribió en uno de sus posteos más recientes.
Sobre Thiago, no guarda rencor. “No sé qué pasará en el futuro. Hoy cada uno necesita su espacio. Él también está preocupado por las nenas, y eso es lo más importante”, dijo. Con apenas 28 años, Daniela está enfrentando un combo emocional devastador: recién parida, con sus hijas hospitalizadas y separada del padre de sus bebés. Pero si algo demostró en la casa de Gran Hermano, es que no se rinde fácil.
Fuente: https://www.paparazzi.com.ar/