Desde ayer, los habitantes de la comunidad detectaron la presencia de animales muertos en la zona. “Estamos muy preocupados, es muy triste la situación, es único, nunca antes esto ha sucedido”, expresó un vecino, señalando que el problema parece extenderse, ya que aún hay peces que agonizan en el lugar.
Ante esta situación, la gente del lugar realizó un monitoreo de la zona alta y baja de la quebrada, constatando la magnitud del daño. Los miembros de la comunidad también advirtieron que el problema podría estar relacionado con actividades industriales en la zona, ya que mencionaron la presencia de empresas que utilizan explosivos y prácticas de extracción que podrían haber contaminado el agua.
“Nosotros sabemos que acá en la serranía Yariguarenda tenemos presas que explotan nuestras tierras, y hace poco hubo una empresa que vino a recoger dinamitas que quedaron de muchos años atrás”, advirtió Natalia, una referente de los locales, sugiriendo que estos antecedentes podrían estar vinculados con la actual situación.
La comunidad, quien dio a conocer la situación a través de las redes sociales, solicita a las autoridades y a organismos de salud que intervengan de manera urgente para investigar las causas de la mortandad de peces y ranas, y que se implementen medidas inmediatas para proteger a las familias que dependen de esta fuente de agua.
Por el momento, se recomienda a la población evitar el contacto y consumo del agua de la quebrada hasta que se conozca el origen del problema y se garantice la seguridad sanitaria.