En plena escalada de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, una destacada misión comercial del gigante asiático arribará esta semana a Buenos Aires con el objetivo de profundizar inversiones y afianzar la relación bilateral con la Argentina. La delegación estará integrada por 15 altos funcionarios y representantes de empresas líderes de sectores clave como energía, infraestructura, transporte, tecnología, finanzas y agroindustria.
La comitiva será encabezada por autoridades del Consejo para la Promoción del Comercio Internacional de China (CCPIT) y la Cámara de Comercio Internacional de China (CCOIC), y contará también con la presencia de CEO de importantes compañías como Sinograin Oils, China CO-OP Cereals and Oils, Power Construction Corporation, CRCC, Hisense, ZTE, ICBC y Bank of China.
La visita se da apenas semanas después del fuerte respaldo brindado al presidente Javier Milei por parte de Estados Unidos, con la llegada del secretario del Tesoro, Scott Bessent, y del jefe del Comando Sur, Alvey Hosley. En contraste, China apuesta a consolidar su presencia regional mediante inversiones clave y acuerdos bilaterales. Uno de ellos será la renovación del convenio firmado en 2016 con la Cámara de Asia, presidida por Rallys Pliauzer.
La agenda incluirá un cóctel empresarial con ejecutivos argentinos de laboratorios como Bagó, firmas alimenticias como Molino Cañuelas, biotecnológicas como Biosidus, bancos, estudios jurídicos y empresas logísticas.
La relación comercial
China busca diversificar sus mercados frente al impacto de las tarifas estadounidenses del 145% que ya golpean su sector fabril. En este contexto, la relación con Argentina adquiere mayor relevancia: el país asiático es el principal proveedor de bienes a la Argentina, con un 24,7% del total de importaciones en el primer trimestre, superando a Brasil y a Estados Unidos.
La visita también coincide con la renovación del swap entre el Banco Popular de China y el Banco Central (BCRA) por US$5.000 millones, considerado estratégico para las reservas del país.
Además del aspecto comercial, la delegación explorará oportunidades de cooperación tecnológica y científica, incluyendo la posibilidad de establecer centros de innovación conjunta y convenios de transferencia tecnológica. Este eje cobra especial relevancia ante el interés argentino por fortalecer su capacidad industrial y mejorar la competitividad en sectores de alto valor agregado, como la biotecnología y la inteligencia artificial.