“La industria automotriz tiene un gran vínculo con la minería”, planteó Ezequiel Vallejos, director de Asuntos Corporativos de Toyota Argentina, al comenzar su disertación. Desde una mirada que articula innovación, sustentabilidad y desarrollo industrial, el representante de la automotriz explicó cómo la electrificación del transporte está generando una transformación estructural que involucra de manera directa a sectores clave como la minería.
Durante su exposición, titulada “Multitecnologías: la estrategia de Toyota para la movilidad sustentable”, Vallejos brindó un detallado recorrido por el cambio de paradigma que atraviesa la industria automotriz a nivel global, impulsado por la urgencia de reducir las emisiones de carbono. Señaló que el transporte es responsable del 12% de las emisiones de carbono en el mundo y que el sector consume casi el 50% del petróleo que se produce anualmente. En ese contexto, indicó que los principales mercados —como Europa, Japón y Estados Unidos— están acelerando la transición energética, y eso impacta directamente en el diseño, producción y consumo de vehículos.
Una estrategia multitecnológica
Lejos de una visión que imponga una única solución tecnológica, Toyota trabaja con lo que denomina una “estrategia multitecnológica”. Vallejos explicó que la compañía desarrolla distintas formas de motorización que se adaptan a las particularidades de cada país y región. Así, la oferta de vehículos incluye híbridos (que combinan motor a combustión con uno eléctrico), híbridos enchufables, eléctricos a batería y, a futuro, también aquellos impulsados por celdas de hidrógeno.
“Lo que proponemos es una transición progresiva, ordenada, sin imposiciones. Cada mercado tiene su madurez, su infraestructura energética y su política industrial”, argumentó. En ese sentido, el vocero remarcó que Toyota considera al cliente como un actor central y que el objetivo es ofrecer alternativas reales, accesibles y adaptadas a las condiciones locales.
El vínculo directo con la minería
Fue en este punto donde Vallejos estableció la conexión con el sector minero. Al hablar del impacto material de estas tecnologías, explicó que los autos eléctricos y electrificados demandan mayor cantidad de ciertos minerales, especialmente cobre y litio.
“El cobre y el litio son dos drivers de crecimiento de la minería en Argentina, y eso tiene una relación directa con la industria automotriz”, sostuvo. Para ejemplificarlo, detalló que mientras un vehículo convencional requiere unos 25 kilos de cobre, un híbrido necesita alrededor de 40 kilos, y uno a batería puede utilizar entre 80 y 90 kilos. En el caso de ómnibus y camiones eléctricos, el consumo de cobre puede escalar a 300 kilos por unidad.
“Imagínense cómo exponencialmente se consumiría más cobre si los 100 millones de autos que se producen por año en el mundo fueran eléctricos”, dijo. En cuanto al litio, subrayó que las baterías son el componente que mayor volumen de este mineral utilizan, lo cual vuelve a poner a países productores como Argentina en el centro del mapa industrial global.
Vallejos también mencionó los desafíos que trae consigo esta transformación, entre ellos la necesidad de infraestructura eléctrica.
Contó que cuando Toyota decidió lanzar al mercado argentino su línea Lexus, que incluye autos híbridos enchufables, debieron invertir en infraestructura adicional para garantizar la carga de los vehículos.
“Como un ejemplo que podemos dar, está el concesionario Lexus que tenemos en Ciudad de Buenos Aires. Se abrió en el año 2019, cuando se hizo apertura que hacen un nuevo tendido eléctrico, es decir, se rompieron cuatro cuadras de Buenos Aires para llevar la potencia necesaria. El año pasado cuando se instalaron cargadores de carga rápida y de velocidad media la capacidad de la red no era suficiente y hubo que volver a romper y llevar seis cuadras de conexión nueva y de más potencia para poder tener dos cargadores instalados en el concesionario”, precisó.
Toyota en Argentina y el desarrollo regional
El vocero también repasó brevemente la historia de Toyota en el país. Recordó que la compañía se radicó en 1997, y que para ellos es fundamental construir alianzas con sectores estratégicos como el agro, la energía y la minería.
“Hay oportunidades que estamos viendo que van a seguir y por muchos años, así que tenemos muchas para el futuro”, finalizó.