El papa Francisco murió a las 7.35 de la mañana (hora de Italia), en su residencia de Santa Marta. Tenía 88 años. El Vaticano difundió hoy el relato oficial de sus últimas horas con vida, en un conmovedor testimonio que confirma el perfil reservado y humilde con el que Jorge Mario Bergoglio atravesó su pontificado y también su partida.
Según informó Vatican News, medio oficial de la Santa Sede, los primeros malestares se presentaron a las 5.30 de la madrugada, apenas minutos antes del horario en el que solía despertarse. Más de una hora después, y tras saludar a su enfermero personal, Massimiliano Strapetti, el pontífice entró en coma. A las 7.35, su corazón dejó de latir.
En su informe, el Vaticano aseguró que Francisco “no sufrió, todo sucedió rápidamente”. La escena fue íntima y serena, sin clamor ni aparatosidad, como él mismo había deseado. “Fue una muerte discreta, casi repentina”, dijeron.
Su última Pascua, su última frase
El domingo de Resurrección, un día antes de su fallecimiento, el papa participó activamente de los ritos pascuales. Pronunció su última bendición “urbi et orbi” desde el balcón de la basílica de San Pedro y saludó a miles de fieles en la plaza.
Antes de esa aparición pública, miró a su enfermero y preguntó con un dejo de duda:
“¿Cree que podré hacerlo?”
Strapetti le respondió que sí. Y Francisco no solo dio la bendición, sino que recorrió la plaza a bordo del papamóvil durante 15 minutos. Al regresar, le agradeció con otra frase reveladora:
“Gracias por traerme de vuelta a la plaza”.
Por la tarde, descansó y más tarde cenó con normalidad. Nadie sospechaba que sería su última noche, que era su última cena.
Causas de la muerte
Este martes, el Vaticano también confirmó el diagnóstico oficial: el papa Francisco sufrió una apoplejía cerebral (ictus) que derivó en un colapso cardiovascular irreversible. El informe médico detalla que padecía múltiples condiciones previas:
Insuficiencia respiratoria aguda,
Neumonía multimicrobiana bilateral,
Bronquiectasias,
Hipertensión arterial,
Diabetes tipo II.
La determinación de su muerte se realizó mediante un registro electrocardioanatómico, según el protocolo médico.
El adiós de un papa histórico
Francisco fue el primer papa latinoamericano, el primero jesuita y el primero en más de 1.200 años que no provenía de Europa. Su pontificado quedará marcado por su carisma, sus gestos hacia los pobres, su defensa del medioambiente y su lucha interna por modernizar una Iglesia en crisis.
El funeral se realizará este sábado, con la presencia de líderes religiosos, autoridades del mundo y miles de fieles que viajarán hasta Roma para despedirlo. Luego, comenzará el proceso hacia el cónclave que elegirá a su sucesor.