Quien lo instaló fue el interventor del IPS Salta, Emilio Savoy, a través de su pedido para que los médicos de la provincia comiencen a recetar remedios más accesibles para los pacientes. Se trata de medicamentos que contienen los mismos principios activos que los de marca, pero que permiten un importante ahorro para todo el sistema de la obra social más grande de Salta.
Savoy advirtió que el gasto mensual en medicamentos de alto costo supera los 5.000 millones de pesos. Entre los tratamientos que más inciden en ese presupuesto se encuentran los vinculados a patologías como el cáncer, el VIH, la hemofilia y algunas formas de epilepsia.
Ante estas declaraciones, El Tribuno consultó al Círculo Médico, y su presidenta, Cristina Sánchez Wilde, brindó su postura respecto al planteo del IPS.
“Los medicamentos genéricos están regulados por la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica), es decir, son medicamentos seguros. Los genéricos son aquellos que no llevan una marca comercial prestigiosa, pero tienen los mismos principios activos, la misma dosis, seguridad, concentración y vía de administración que su par de marca. Tienen que tener la misma calidad y uso terapéutico, es decir, que son bioequivalentes. Por lo tanto, tienen la misma efectividad. Eso no lo podemos comprobar nosotros como médicos, pero sí está regulado por la ANMAT”, explicó Sánchez Wilde.
La ANMAT es el organismo estatal que protege a la población garantizando que los productos para la salud sean eficaces, seguros y de calidad. Si establece que un medicamento genérico es seguro, los médicos pueden recetarlo y los pacientes pueden exigirlo.
“Es cierto, los genéricos bajan muchísimo los costos. Incluso hay medicamentos genéricos en especialidades como la oncología, donde muchas quimioterapias ya son genéricas. También tienen sus bioequivalentes y funcionan. Justamente estaba leyendo unos artículos en la revista The Lancet que muestran cómo reducen los costos de forma impresionante”, señaló la médica, y confirmó que “existe una relación seis a uno”: es decir, un medicamento de marca puede ser hasta seis veces más caro que su versión genérica.
Sánchez Wilde también advirtió sobre la construcción cultural errónea que hace creer que un medicamento famoso, con mucha publicidad, es más eficaz que su versión genérica. “Y esto no es así. Los pacientes tienen que empezar a exigir la opción del genérico, y los médicos debemos ofrecerla. Lo dicen los científicos que certifican las drogas; por lo tanto, son seguros”, subrayó.
Aunque no se convocó a una reunión específica sobre el tema, la presidenta del Círculo Médico confió que “es un tema que siempre está presente”. Dio además un ejemplo sobre su importancia económica: tanto en el ámbito privado como en los hospitales públicos se utilizan medicamentos genéricos. Incluso, cuando no hay disponibilidad de un remedio de marca, se le recomienda al paciente adquirir el genérico.
“No es algo realmente problemático, siempre y cuando se trate de medicamentos fabricados en el país y autorizados por la ANMAT. Los hospitales no compran medicamentos de marca, porque si no el presupuesto se va al suelo”, concluyó.
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Definen lo que se viene
Cristina Sánchez Wilde confirmó que se realizaron reuniones con la gente del IPS Salta por la deuda de la obra social y por las validaciones on line de las consultas. Dijo que faltan los detalles de compatibilizar los sistemas de las empresas con las que trabajan cada sector y que sólo es cuestión de tiempo. Hablamos acá de la facilidad de comprar las consultas médicas por la web y que luego las reciban los médicos. Una agilización que hacía falta desde hace tiempo que se suma a la receta electrónica para su uso luego en las farmacias. Dijo además que las deudas con el IPS se van normalizando. “Se pagaron las prácticas de diciembre. El martes vencieron las de enero, hay unos días legales que se pueden esperar para el cobro. Ya se pagaron las consultas semanales. Podemos decir que sí, que estamos al día, que de momento no hay reclamos. Esperemos que sí se paguen las prácticas ahora dentro del plazo. Por lo menos hay una voluntad de pago del IPS. Tuvimos una reunión con el interventor y sí hay voluntad de pago de sanear los números”, concluyó.
Lo que se viene además son los aumentos. Ya hubo un incremento a los empleados del Estado, que si bien no es un aumento grande, pero es suba al fin. El aumento es del 9% repartido en 3 meses. “Ese 3, 3 y 3, queremos que se aplique a consultas y prácticas. Antes se aplicaba automáticamente, pero ahora tenemos que tener en cuenta y bien en claro los números adeudados y desde dónde se aplica el porcentaje”, dijo Sánchez Wilde. Ese entonces es el tema pendiente para su tratamiento en las próximas semanas.