En el Senado avanza la definición del proyecto de ley para incorporar en el Boletín Oficial el digesto normativo provincial que contiene todas las leyes sancionadas en Salta, desde 1855 a la fecha, para mejorar el acceso de la ciudadanía a la información pública.
Para emitir dictamen para la iniciativa que establecerá que las leyes, decretos y resoluciones provinciales se deben publicar en el Boletín Oficial, en función del artículo 5º del Código Civil y Comercial de la Nación, la comisión de Legislación General del Senado se reunió ayer con funcionarios.
Por el Boletín Oficial asistió la directora, Victoria Restom, junto al asesor jurídico del Ejecutivo, Abel Cornejo, quienes destacaron la importancia del digesto, como elemento que condensará toda la memoria legislativa.
El proyecto que ya tiene media sanción de Diputados establece que el Boletín Oficial tiene a su cargo la actualización del digesto, pero no podrá implicar modificaciones que alteren el espíritu de las leyes.
Además, determina que la edición electrónica deberá estar disponible en el sitio web oficial del Boletín Oficial, habilitando a los usuarios parámetros que faciliten la búsqueda de normas y permitiendo su descarga.
Para garantizar la facultad del Legislativo se agregará un artículo para que la dirección del Boletín Oficial eleve a la Legislatura, al menos una vez al año, las tareas realizadas del periodo legislativo vencido, las que deberán ser aprobadas por ambas cámaras.
Victoria Restom reiteró la importancia del proyecto para la accesibilidad a la información pública, dijo que se viene trabajando en el digesto hace varios años con el Poder Legislativo, a través de un modelo dinámico, de fácil uso para el ciudadano y accesible para personas con discapacidades.
Explicó que el digesto permitirá la búsqueda de normas por temas, por años y por número, conteniendo desde la Ley número 1 de 1855 hasta la última que surja este año.
A su turno, Cornejo destacó la importancia del digesto como elemento que condensará toda la memoria legislativa y opinó que si las leyes no son públicas no son oponibles, siendo esa tarea de difusión la del Boletín Oficial.