Gilad Gil Pereg, el ingeniero electrónico israelí condenado a prisión perpetua por matar a tiros y golpes a su madre y su tía en Guaymallén, provincia de Mendoza, murió ayer domingo por la noche tras sufrir una descompensación en el hospital penitenciario de El Sauce de esa provincia.
Está descartado que Pereg -llamado “el hombre gato” tras hallado maullando desnudo en su celda tras su arresto, que vivía entre mugre y DVDs de pornografía con una decena de felinos en la casa donde se hallaron los huesos de sus víctimas- haya sido víctima de un homicidio. Sin embargo, dado que la muerte ocurrió en un contexto penitenciario, se impone una investigación de rigor con una autopsia.
El expediente, bajo la calificación de averiguación de causales de muerte, estará a cargo de la fiscal Andrea Lazo, confirmaron fuentes judiciales a Infobae.
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