“No me perdono a mí misma haberme sentido tan indefensa y vulnerable, querer defenderme y proteger de mis hijos pero no poder hacer nada, ver a mis pollitos con sus ojitos llenos de miedo, rogar por sus vidas sin importarme más nada”, señaló la mujer.
Y añadió: “Dos inhumanos te entran a tu casa, te amenazan, te maltratan física y psicológicamente, sin compasión por los niños, por las mujeres que pueden ser sus propias madres, sabiendo de todo lo malo que pueden causar”.
Además, manifestó: “Hoy no tengo ganas de decir gracias a que no nos pasó nada porque lo que vivimos no se va a borrar de nuestras mentes nunca. Mi hijo se va acordar cómo se llevaban a su madre sin saber si ese iba a ser el último día que la vería con vida. Yo solo pedía que corriera, que no se cansara de correr. Y acá está lo peor de todo, lo que viene después de un simple robo”.
“¿Cómo se vuelve a dormir ahora? ¿Cómo se entra otra vez a ese hogar que te sentías tan seguro?¿Cómo se vuelve a confiar en las personas? ¿Cómo haces para que tus hijos olviden? ¿Cómo vuelve uno a sentirse tranquilo en un nuevo hogar? ¿Cómo vuelve uno a dormir sin miedo? ¿Y ahora qué hacemos?”, planteó Rivero.
En su descargo en redes sociales, la esposa del deportista también expresó: “Odio ser la víctima de esta situación. No le deseo algo así a nadie, menos delante de sus hijos y de su madre”.
Fuente: https://salta.telefe.com/redes