A través de una cámara de seguridad descubren como un cuidador le coloca una inyección letal a un caballo

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Una familia p ropietaria de un caballo “pura sangre” de 3 años, al que habían bautizado como Festín Texano, denunció en los últimos días que el cuidador del animal lo mató luego de inyectarle una sustancia no identificada en el cuello.

Una familia propietaria de un caballo “pura sangre” de 3 años, al que habían bautizado como Festín Texano, denunció en los últimos días que el cuidador del animal lo mató luego de inyectarle una sustancia no identificada en el cuello.

Una cámara de seguridad instalada en el stud donde estaba el animal, que en diciembre había obtenido un primer lugar en Palermo, fue clave para que la familia descubriera el accionar del hombre que trabajaba con ellos hace más de dos años.

Miguel Iriarte, dueño del animal, en diálogo con El diario de La Pampa, contó: “Festín texano es un caballo ganador de Palermo. Nos dijo (Ari Soares de Oliveira, que también es jockey) que había muerto por un infarto. Confiamos en que había sido así, aunque el caballo estaba bien, sano. Y unos días después empezamos a ver las imágenes del stud, llegamos al minuto donde había muerto”.

Su hija sumó, a través de un posteo en redes sociales: “El video muestra cómo él termina con la vida del pobre animal. ¡La justicia no está haciendo nada! “.

Al ver las cámaras de seguridad, la familia decidió radicar la denuncia en contra del hombre al que se observa presenciar el momento de la muerte. Incluso le saca fotos al animal moribundo y, en tres oportunidades, lo toca como para certificar la muerte. Luego, toma una escoba y barre el stud.

Tras la difusión de las imágenes, el abogado de la familia, Nicolás Casagrande, detalló que la denuncia se presentó el 13 de mayo y se quejó porque, al momento de la autopsia, el veterinario forense tomó y preservo muestras de sangre, ni fluidos del animal, que podrían servir para identificar qué sustancia fue la que le inyectó al caballo.

Según publica El Diario de La Pampa, se sospecha que la sustancia utilizada es magnesio endovenoso que se utiliza para casos de eutanasia en caballos, ya que les paraliza el corazón en pocos minutos.

Para el letrado la actitud de Ari Soares de Oliveira es sospechosa, ya que, en el video, se ve cómo llama por teléfono, toma fotos y videos del proceso de muerte del caballo. “Estaba con el celular esperando el desenlace. Hay un primer contacto que no es con los dueños. Inicialmente, no los contacta a ellos. No sabemos esa manipulación del teléfono con quién lo hace, pero no es con los Iriarte”, aseguró. En una primera etapa, la causa está caratulada como maltrato animal.

Fuente: https://www.eltribuno.com/salta/seccion/policiales