El cuñado del condenado jefe narco Julio Andrés Rodríguez Granthon fue detenido en el mediodía de este miércoles en el centro de Rosario tras una persecución que fue realizada por agentes de civil de División de Homicidios de la Policía de Investigaciones y que incluyó un disparo al aire por parte de los efectivos. Se trata de Noel R., de 25 años, sobre quien pesaba un pedido de captura en el fuero federal por narcotráfico y otro de la Justicia provincial por asociación ilícita.
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El operativo comenzó en la vía pública, cuando los agentes de civil de la PDI identificaron al sospechoso e intentaron arrestarlo en la calle. Allí, de acuerdo a fuentes policiales, tuvo lugar un forcejeo y Noel R. se echó a correr hasta que ingresó a un edificio en el que alquila un departamento.
En la persecución, uno de los policías realizó un disparo al aire con el objetivo de que el prófugo dejara de correr. Otro agente, al momento de entrar a la carrera a la torre a la que había ingresado el joven, rompió un vidrio de la puerta y sufrió una herida cortante por la que tuvo que recibir asistencia médica.
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Noel R. vivía en un departamento ubicado en Corrientes al 100, en pleno centro de la ciudad, en un inmueble que figura a nombre de la madre de Mariana Ortigala, sospechada de ser la testaferro de Ariel Máximo “Guille” Cantero, líder de la banda narco Los Monos. Después del arresto se allanó el lugar y se incautaron dos millones de pesos y una máquina de contar billetes.
El dinero que le secuestraron al cuñado de Rodríguez Granthon
El dinero en efectivo no es un dato menor, ya que el joven está sindicado en la causa federal sobre la que tiene pedido de captura –en la que intervienen Adriana Saccone, titular de la Fiscalía N° 3, Javier Arzubi Calvo, a cargo de la Fiscalía N° 1, Diego Iglesias, jefe de la Procunar, y Diego Velasco, al mando de la Procelac– como un eslabón intermedio de la banda que lidera su cuñado Rodríguez Granthon desde el penal federal de Marcos Paz.
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Puntualmente, en el expediente Noel R. está señalado como de los encargados de la recaudación de la plata producto de la venta de droga y posterior compra de divisas en cuevas del centro de Rosario para la adquisición de cocaína, que se paga en dólares.
La propiedad en la que pernoctaba el joven se encuentra en inscripción litigiosa desde septiembre del año pasado, cuando los fiscales Pablo Socca y Miguel Moreno imputaron a Ortigala por realizar extorsiones al dueño de una agencia de quiniela a pedido de “Guille” Cantero.
Ahora, el cuñado del jefe narco –es hermano de Lucila R., actual pareja de Rodríguez Granthon– también tendrá que rendir cuentas ante los fiscales provinciales Franco Carbone y Valeria Haurigot, quienes habían pedido su captura en una causa contra la presunta banda del capo narco por delitos violentos.