¿Cayó la presión tributaria? Por qué un informe desmiente que los impuestos tengan menos peso

0
58
Luego de que el Gobierno pateara para el largo plazo las expectativas de la reforma tributaria, salvo los beneficios inmediatas que plantea el “Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones” (RIGI) de la Ley Ómnibus, se conoció un dato engañoso sobre la carga impositiva en la Argentina.

Un informe reciente del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) reveló que si bien la presión tributaria efectiva nacional culminó 2023 con una baja de 1,4 puntos porcentuales con respecto al año anterior (22,8% del Producto Bruto Interno (PBI) no se debió a decisiones normativas sino a los efectos coyunturales.

“En esta recaudación anual está implícita el impacto de la fuerte sequía que afectó al país”, sostuvieron en el instituto. Y detallaron: “Al excluir del análisis los tributos asociados al comercio exterior (derechos de exportación, importación e impuesto PAIS) la presión tributaria interna ascendería al 20,5% y tendría un descenso de 0,5 p.p. del PIB respecto a la del año 2022”.

Si se los observa a nivel desagregado, el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y PAIS presentaron el mayor incremento de la presión efectiva con el 0,8 p.p y 0,38 p.p respectivamente en términos del PBI. En el otro extremo se ubicaron el de los Combustibles Líquidos, Derechos de Exportación y Ganancias.

Mientras que el impuesto a Créditos y Débitos en cuentas bancarias, Seguridad Social, internos coparticipados, Bienes Personales y Derechos de Importación prácticamente no registraron variaciones significativas.

En términos de la evolución, y si considerar la aclaración anterior, la presión tributaría efectiva sería la más baja de los últimos 5 años . Durante el primer año de gestión de Alberto Fernández, el indicador se encontró en 23%, subió a 24,1% en 2020 para luego caer al 23,7% al año siguiente y remontar al 24,2% en los anteúltimos doce meses de su mandato.

A nivel de montos, en 2023 la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) alcanzó una recaudación de $42.981.000 millones. Una cifra, que si se la contempla a nivel de la inflación -148,2% acumulada a noviembre- sufrió una caída del 7% respecto al año anterior.

En el conjunto, tres tributos explicaron el 76% de la participación: el IVA con una suma de $14.557.560 millones (v.i real de 9%); los Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social $9.286.490 millones (v.i real de -1,4%); y Ganancias $8.782.659 millones (v.i real de -17,3%).

Sobre este último, influyó la elevación del mínimo no imponible a $1.770.000 en octubre por parte del exministro de Economía y candidato por Unión por la Patria (UP), Sergio Massa, para que “menos trabajadores lo paguen”.

Una caída menor a la que tuvieron los Derechos de Exportación, con solo $1.544.729 millones de recaudación (v.i real de -61,9%) y el impuesto a los Combustibles Líquidos $526.432 millones (v.i real de -45,4%). En tanto que, PAIS -en especial por la elevación de alícuota al 17,5% que impuso Luis Caputo-, IVA e internos coparticipables fueron en la dirección contaría.

Fuente: https://www.cronista.com/