Habrá tenido en el estómago, ahí por donde pasa todo lo que emocionalmente nos desborda, una batalla de sensaciones. Entre las burbujas de una felicidad que embriaga y las contracciones del pánico escénico que siempre asaltan antes de todo gran acontecimiento. Entre la confianza y las dudas, entre la satisfacción y la incertidumbre de no estar a la altura, Diego Martínez consumió las últimas horas del 2023 y el inicio frenético de este 2024 que ya lo tuvo vestido de Boca. Sí, porque un 1 de enero ya se presentó a trabajar en su nuevo club. Para no perder el tiempo… Leer más.
Martínez estuvo con todo su CT. (Prensa Boca
Fuente: https://www.ole.com.ar/