Simpatizante del actual gobierno encabezado por Javier Milei, Robertito iba manejando su camioneta cuando tuvo que frenar en un semáforo. Allí lo abordaron dos personas, según él padre e hijo, para pedirle dinero a cambio de un lavado de los vidrios. “Yo venía de polarizar los vidrios por una cuestión de seguridad, para sentirme más seguro y cuando te hacen ese trabajo no podés bajar las ventanillas. Incluso te traban los botones para que no lo hagas de manera instintiva” arrancó el periodista.
“Yo les quería decir o que si o que no, pero no podía porque no podía bajar la ventanilla. ¿Pero cómo les podía explicar eso? Era imposible. Entonces iban pasando los segundos y esta gente se fue poniendo un poco pesada digamos. O insistente. No sé, entiendo que es un derecho de cada uno dar o no dar, tiene que ser una decisión no una imposición” continuó.
“Cuando comprendieron que no les iba a dar plata -recordó el nacido en la provincia de Mendoza- empezaron con una serie de términos tremendos. Desde “succionador de penes” a “traste partido”, por ejemplo. Ninguna novedad, pero bueno, no paraban. Por eso decidí bajarme del auto, prender el celular y filmarlos. Me estaban agrediendo sin ningún motivo”.
COMO SE TOMO ROBERTITO FUNES UGARTE EL APODO DE ROSCA FLOJA QUE SE VOLVIO TAN POPULAR EN HORAS
“Me acerqué y seguían en la misma, pero claro, como los confronté decían que no me habían insultado. Ahora me decían “dale plata a los pobres, dale”… todo a los gritos. Vino un policía, me preguntó si quería denunciarlos, porque les dije que los iba a denunciar, pero qué pasó… tenía que ir hasta una comisaría que me quedaba un poco lejos”. Fue allí que se escucha a uno de los “trapitos” gritarle “Andá payá, Rosca floja”. El seudónimo se viralizó y en cuestión de horas estaba en boca de “medio mundo”.
Entrevistado por Puro Show, Robertito contó qué le pareció. Y a decir verdad, se lo tomó bastante bien. “Ja, ja, ja, ja…. Mirá qué adjetivo… ¡Uno nuevo! Decime algo que no sepa, je…. ¿Ah me dijeron eso? ¡No escuché! Es que me dijeron tantos que no me acuerdo. ¿No sabés lo que quiere decir? Preguntale a… no voy a decir. Nada, lo que nos pasa a todos los argentinos todos los días cuando estás en un semáforo y te interceptan y te agreden. Si vos no me jodés, yo tranquilo. Pero si me buscás te enfrento. Punto, ya está”.
Fuente: https://www.paparazzi.com.ar/