Mucho antes de que Facebook revolucionara la manera en que las personas se conectan en línea, Mark Zuckerberg ya había demostrado un talento inusual para la programación.
Lo que pocos saben es que su primera creación relevante no fue una red social global, sino un sistema de mensajería diseñado para mejorar la comunicación en el consultorio dental de su padre. Su nombre era ZuckNet, y su historia revela cómo, desde la adolescencia estaba destinado a cambiar el mundo digital.
Un joven Mark Zuckerberg confirmando su ingreso a Harvard en 2002 – (Mark Zuckerberg)
La influencia de Edward Zuckerberg en el creador de Facebook
A finales de la década de los ochenta, Edward Zuckerberg, odontólogo de profesión y apasionado por la informática, decidió comprar una computadora Atari 800. No imaginaba que ese regalo despertaría en su hijo de 10 años una fascinación que marcaría su vida.
Mientras muchos niños jugaban videojuegos, Mark comenzaba a explorar el lenguaje de programación Atari BASIC. Su casa, ubicada en Dobbs Ferry, Nueva York, tenía la particularidad que el consultorio dental de su padre estaba conectado físicamente al hogar familiar, lo que generaba una convivencia entre la vida doméstica y profesional.
Cómo creo su primer sistema de programación Mark Zuckerberg
Con apenas 12 años, diseñó un sistema de mensajería local que conectaba la casa familiar con el despacho odontológico, anticipando su obsesión por unir a las personas a través de la tecnología – (Imagen Ilustrativa Infobae)
La necesidad de mejorar la comunicación entre los espacios fue lo que motivó a Mark a desarrollar ZuckNet, un software de mensajería que permitía enviar textos en tiempo real entre computadoras dentro de la misma red local.
La idea era simple, pero muy útil ya que evitaba los gritos desde la cocina hacia el consultorio, o la tediosa tarea de subir y bajar escaleras cada vez que había que informar algo.
La aplicación no solo era utilizada por los miembros de la familia, también por la recepcionista del consultorio, quien podía notificar a Edward cuándo llegaba un nuevo paciente y cuál era su motivo de consulta.
Mark Zuckerberg con tan solo 12 años, había creado una herramienta funcional, parecida a lo que más tarde serían servicios de mensajería instantánea, pero de uso exclusivo en su hogar.
ZuckNet fue utilizado durante años en la casa-consultorio de los Zuckerberg, hasta que sistemas más avanzados como AOL Instant Messenger lo hicieron obsoleto. Pero el aprendizaje fue clave. Aquel pequeño experimento familiar fue la base para que Mark comprendiera el poder de conectar a las personas a través de la tecnología.
Años antes de Harvard y Facebook, Mark creó un sistema interno para enviar mensajes entre PCs. Usaba Atari BASIC y resolvía un problema cotidiano con una solución casera, pero visionaria – REUTERS/Evelyn Hockstein
Esa no sería la única incursión temprana de Zuckerberg en el desarrollo digital. Durante sus años como estudiante en Harvard, creó Facemash, un sitio web que comparaba fotografías de estudiantes para que los usuarios eligieran cuál era “más atractiva”.
El proyecto causó polémica y casi le cuesta la expulsión, ya que accedió sin permiso a bases de datos internas de la universidad para obtener las imágenes. Aunque la plataforma fue cerrada rápidamente, el episodio mostró otra faceta de Zuckerberg, su capacidad para captar la atención masiva, incluso desde proyectos controversiales.
Mark Zuckerberg anticipa el futuro de Facebook: menos humanos, más inteligencia artificial
Mark Zuckerberg reconoció recientemente que Facebook ya no es lo que solía ser. Durante el evento LlamaCon, el CEO de Meta señaló que el objetivo original de la plataforma de conectar amigos y familiares, ha perdido fuerza frente al contenido viral, los videos cortos y los algoritmos que capturan la atención del usuario.
Según explicó, la red social ha evolucionado hacia un espacio donde domina el consumo pasivo de videos, pero anticipa que ese modelo también cambiará. En su visión, los contenidos serán interactivos, los usuarios podrán hablar con elementos del feed, recibir respuestas en tiempo real y hasta jugar con ellos, gracias a agentes de inteligencia artificial integrados.
Zuckerberg asegura que en el futuro habrá más bots que humanos interactuando en las plataformas.
Empresas y creadores podrán contar con asistentes virtuales que gestionen la relación con sus comunidades. Estos agentes, entrenados con información y valores personalizados, funcionarán como representaciones digitales del usuario.
La apuesta por la inteligencia artificial marca un giro en la estrategia de Meta. En lugar de solo mirar, el usuario conversará con su entorno digital. Y con ello, Facebook buscará reinventarse una vez más.