Con escarapelas al pecho, ponchos al viento y mucha emoción, el barrio 25 de Mayo vivió este domingo una jornada especial para conmemorar la Revolución de 1810. El tradicional desfile patriótico reunió a una amplia diversidad de participantes: escuelas, agrupaciones scout, clubes de iglesia, cuerpos infantiles de seguridad, ballets folclóricos y vecinos de distintos puntos de la ciudad que se acercaron para celebrar en comunidad.
El desfile comenzó con la participación de los Boy Scouts y representantes de excombatientes, seguidos por el Club de Aventureros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, cuyos miembros llegaron desde el barrio Libertad. “Es mi primera vez, y también la de los chicos. Lo vivimos con mucha alegría”, contó Lucas, uno de los coordinadores.
Foto: Javier Rueda
Entre las escuelas presentes estuvo el Colegio Secundario N° 5046 Juan Calchaquí. “Es la primera vez que participamos y estamos orgullosos de estar en este evento tan importante”, expresó su vicedirectora, Isabel Retambay. Alumnos de tercer año oficiaron de abanderados y escoltas. “Es una linda experiencia”, comentó Juliana, de Villa Asunción, mientras aguardaba su turno para desfilar.
También se sumaron agrupaciones culturales como la Asociación Chuquisaca, que cada año forma parte del desfile. “Nos sumamos al festejo porque vivimos en esta ciudad muy agradecidos. Los residentes bolivianos tenemos dos amores: nuestra patria y esta patria que nos cobija”, expresó Alfredo Aníbal, presidente de la agrupación.
El desfile se convirtió en un verdadero encuentro barrial. Ruth, vecina de Santa Rita Oeste, llegó con su hija y sus sobrinas, quienes participaron en uno de los ballets folclóricos. “Hace años que venimos compartiendo este desfile. Es muy lindo ver la participación de todos los vecinos. Después seguimos festejando con otro baile en Santa Rita”, contó con entusiasmo.
Foto: Javier Rueda
En las veredas, Patricia compartía el momento con su hija, mate en mano y escarapela en el pecho. “¿Qué más puedo pedir? Compartir el 25 de Mayo con mi hija, bailes, música y comunidad”, dijo con orgullo.
El cierre del desfile estuvo a cargo del Batallón N° 9 y el Cuerpo Infantil de la Comisaría Séptima, quienes desplegaron un colorido paso musical que arrancó aplausos y sonrisas entre los presentes.
No faltaron los adultos mayores del centro de jubilados de calle Talcahuano, quienes también hicieron patria desfilando. “Todos los años participamos. Desde nuestro lugar como adultos mayores, seguimos haciendo patria”, afirmó Francisca.
El desfile en el barrio 25 de Mayo no fue solo una conmemoración histórica, sino también una celebración del presente: un reflejo del orgullo popular, la identidad barrial y el deseo compartido de construir comunidad desde la alegría y el recuerdo.