La tensión se intensificó tras la masacre de turistas ocurrida el mes pasado en la Cachemira administrada por India, hecho que motivó a Nueva Delhi a lanzar el miércoles la “Operación Sindoor” en zonas de Pakistán y la Cachemira bajo control paquistaní, con el argumento de atacar una supuesta “infraestructura terrorista”.
Desde entonces, ambos gobiernos se acusan mutuamente de intensificar el enfrentamiento, intercambiando drones y misiles, pese a los llamados internacionales a la contención. La región de Cachemira, reclamada en su totalidad por India y Pakistán, ambos países con armamento nuclear, ha sido motivo de tres guerras y continúa siendo un foco permanente de confrontación.