Desde su Arequito natal, pueblo de Santa Fe en el cual vive actualmente con su familia, compuesta por su marido, Jeremías Audoglio y sus dos hijas, Antonia y Regina, hoy lleva una vida muy tranquila. Pero el hecho de comenzar a trabajar de muy joven, con apenas 14 años, y todo lo que eso implicó, llegaron a causar un impacto negativo en La Sole.
“Internamente fue duro y te lo digo, porque aparecía el celular y yo era una de las pocas que tenía celular en mi grupo de amigos y lo escondía. No era la típica que andaba, o sea, cuando vos vivís es una sociedad pequeña, chiquita, donde todos nos conocemos, tomás otros recaudos”, expuso Soledad.
Mirá También ¡Exclusivo! Las fotos de Mirtha Legrand en la Feria del Libro
Parte de su niñez, toda su adolescencia y ya de adulta, Pastorutti debió sortear diferentes situaciones que atravesó a partir de su popularidad. Y si bien eran diferencias que la afectaban, logró mantenerse en el camino correcto y alcanzar el éxito.
SOLEDAD PASTORUTTI SE SINCERÓ SOBRE SU CARRERA
“Está el que se compra el auto 0KM y pasa por el centro del pueblo a todo lo que da. Y está el que toma más recaudos porque sabes que hay cosas que son como guiños dentro de la sociedad. Yo ya tenía uno, que no lo podía evitar, que era que ya era famosa”, contó en diálogo con Infobae.
Mirá También Cómo es la habitación de la Sole Pastorutti en su mansión de Arequito
Sobre sus mismas palabras, detalló: “Eso para mucha gente de mi edad, en ese momento decía: ‘ay’, o sea, eso y agrandarse, era lo que venía. Sí, era un poco incómodo a veces, no sé si culpa, yo trabajé mucho siempre”.
“Hoy te puedo decir que no tengo culpa de nada porque realmente me esfuerzo y me esforcé mucho, pero solamente puede dar fe de ese esfuerzo la gente que está al lado tuyo”, comentó Soledad, recordando los inicios en su carrera como cantante.
Fuente: https://www.paparazzi.com.ar/