El delantero Lautaro Martínez fue una de las figuras de la gran clasificación del Inter de Milán frente al Barcelona, a la final de la UEFA Champions League.
En el minuto 21 del primer tiempo, el “Toro” anotó el tanto que le brindó tranquilidad a su equipo y generó una explosión de gritos en las tribunas del San Siro. Además, a él le cometieron el penal con el que su equipo se puso 2 a 0.
En el primer tanto, el lateral izquierdo Federico Dimarco recuperó la pelota en la mitad de la cancha, una acción que descolocó el retroceso del “Culé”, quien estaba gestando una jugada colectiva que fue interrumpida por uno de los referentes del Inter. Inmediatamente, Dimarco le envió la pelota al lateral derecho Denzel Dumfries, y éste observó que Lautaro estaba en una posición más cómoda para concretar el golpe inicial.
El “Toro” Martínez agarró la pelota y terminó el contragolpe de la mejor forma: un disparo preciso que no pudo sacar el guardameta polaco Wojciech Szczęsny.
Martínez es es el goleador del Inter en esta Champions League con nueve tantos. “No me encontraba en un buen momento ni al 100 por ciento, pero el personal médico trabajó muy duro para que estuviera listo para el partido”, dijo Lautaro, quien luego relató que la semana pasada se dio cuenta que “estaba en problemas, es que me dolían las piernas y veía que no estaba bien”.
“Estuvo dos días llorando en casa, ya que no quería perderme este partido, quería jugar. Por eso me puse una venda muy apretada y bajé al campo. Así es mi naturaleza, así es mi forma de vivir el fútbol”, apuntó.
“Lloré mucho después del partido en Barcelona, pero le prometí a mi familia que hoy iba a jugar y lo hice. Ahora vamos a trabajar en recuperar la pierna y estar lo mejor posible para la final y para la Liga”, cerró el bahiense luego del 4-3 que llevó a Inter a la definición de la Champions ante Arsenal o París Sant Germain con un gol suyo.