Para tratar de concientizar sobre los problemas que le trajo el reality, Tamara Paganini expuso que estuvo al borde del suicidio: “Tenía un montón de amor y sin embargo pensé tres veces tirarme abajo de un tren, en mi agenda tenía tres cartas escritas por si en algún momento tomaba coraje y me quitaba la vida”.
Por lo que confesó qué era lo que le causaba más angustia en aquellos tiempos, y que incluso le despertaban pensamientos muy oscuros: “No conseguía un trabajo normal, no podía caminar por la calle, llegué a vestirme de hombre para salir”.
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Tras esta escalofriante confesión, Viviana Colmenero estuvo en el piso de Intrusos y contó su propia experiencia luego de salir de la casa más famosa. Fue así como destacó qué la salvó de lo peor: “Yo estoy bien gracias a la terapia, no me sorprendió que lo contó Tamara. Tenía conocimiento que la Colo estaba mal, con problemas de alcohol y depresión”.
De este modo, contó cuál fue el problemas más grande que le generó su paso por el reality: “Gran Hermano después ayuda a que no consigas trabajo en la vida común y corriente. Hasta que no entras a conocer esto no te das cuenta que es un negocio del entretenimiento”.
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Para colmo, a la ganadora de Gran Hermano del 2003 recibió duras críticas que provocaron un camino mucho peor: “A mi no me nombran. Me acusaron de que en la final de Gran Hermano 7 entré con una cámara oculta, yo me enteré hace poco”.
“No es normal esa experiencia de entrar en la casa y encerrarse ahí. Cuando estás ahí adentro la das de comer a toda la tele. Nunca me dio de comer la tele, yo me lo gané”, aclaró Viviana Colmenero sobre la diferencia que hay con respecto a todos lo que hablaron sobre ella durante su paso por el show.
Fuente: https://www.paparazzi.com.ar/