En 2015, Ruby Franke, madre de seis hijos, lanzó su canal de YouTube titulado “8 Passengers”, en el que mostraba la vida cotidiana de su familia mormona. A lo largo de los años, su contenido ganó una notable audiencia, alcanzando más de dos millones de suscriptores y convirtiéndola en una figura influyente en la comunidad de padres y madres de Estados Unidos. En sus videos, Ruby compartía desde momentos de diversión familiar hasta las dificultades cotidianas que enfrentaba en su rol como madre. Sin embargo, esta aparente vida perfecta escondía una realidad mucho más oscura.
“Su única ambición era ser la madre perfecta. De eso era de lo único que hablaba. En eso era en lo único que se centraba”, comenta Kevin Franke, su exesposo, en la docuserie disponible en Hulu y Disney+: “El diablo en la familia: La caída de Ruby Franke”, que detalla los sucesos que llevaron a la detención de Ruby y su socia, Jodi Hildebrandt. Ruby no solo se había convertido en una influencer de crianza, sino que también estaba ganando dinero a través de sus vlogs, lo que incrementó la presión sobre sus hijos para mantener su participación en el canal, según The Independent.
En busca de apoyo para manejar las tensiones internas, Ruby se unió a Jodi Hildebrandt, una consejera de salud mental que también se dedicaba a la asesoría familiar a través de su empresa, ConneXions. Las prácticas de Hildebrandt se basaban en estrictas enseñanzas de disciplina, que incluyeron castigos físicos y psicológicos para los hijos de Ruby, los que fueron reforzados por las creencias religiosas mormonas que ambas compartían. Según Kevin, la relación entre Ruby y Hildebrandt: “Era mucho más que una amistad. Mucho más que una hermandad. Era una intimidad incómoda”.
Ruby Franke alcanzó la fama con su canal de YouTube “8 Passengers”, superando los dos millones de suscriptores
A partir de 2021, Hildebrandt se mudó a la casa de los Franke, un cambio que afectó profundamente a la dinámica familiar. Shari Franke, la hija mayor, describe en su libro The House of My Mother cómo la energía en la casa se volvió “oscura” debido a la creciente cercanía entre su madre y la consejera. “Era como una pesadez física. Se sentía muy oscuro”, relató Shari, quien se sintió desplazada por la presencia constante de Hildebrandt, según Rolling Stone.
La tensión creciente y los primeros signos de abuso
Con el paso de los años, las tensiones dentro de la familia aumentaron, especialmente cuando los hijos empezaron a cuestionar la exposición pública a la que los sometía Ruby. El hijo de 12 años de Ruby, Russell, fue uno de los que más sufrió las consecuencias de la estricta disciplina aplicada por su madre y Hildebrandt.
El canal de Youtube de Ruby Franke sigue activo
En un video grabado en 2020, Chad, otro de los hijos, reveló que había sido castigado por Ruby y obligado a dormir en el sótano durante siete meses. Este fue uno de los primeros signos de abuso, que pronto provocó la pérdida de seguidores en el canal de YouTube.
“Los niños empezaron a quejarse de todo”, recuerda Kevin en la docuserie, refiriéndose a cómo los hijos se resistían a ser grabados constantemente. Ruby, por su parte, se centraba en lo que ella describía como el “Contenido Dorado”: videos que generaban ingresos y la mantenían en el centro de atención. La presión para cumplir con esta expectativa parecía ser una de las razones por las que los hijos, cada vez más, se rebelaban ante las grabaciones.
Ruby Franke durante una audiencia del juicio durante el cual se declaró culpable de abuso infantil por maltratar a dos de sus hijos (Ron Chaffin/St. George News vía AP, Pool)
El escape de Russell: el revelador acto de valentía
En agosto de 2023, el hijo menor de Ruby, Russell, se escapó de la casa de Jodi Hildebrandt, donde había sido llevado junto con su hermana Eve. El niño, desnutrido y con heridas visibles, tocó la puerta de un vecino para pedir ayuda. “¿Podrías llevarme a la comisaría más cercana?”, le preguntó al vecino, quien rápidamente llamó al 911. Cuando la policía llegó, encontró a Eve en condiciones similares. Ambos niños fueron llevados al hospital, donde se confirmaron los signos de abuso severo, como lesiones físicas y desnutrición.
La policía descubrió más tarde que Russell y Eve habían sido atados con cuerdas y cinta adhesiva, y se les había negado comida y agua como parte de un régimen disciplinario que Ruby y Hildebrandt justificaban como una “cura” para sus supuestas malas acciones. El fiscal a cargo del caso, Eric Clarke, describió la situación como “un campo de concentración”, dada la gravedad de las heridas de los menores.
La condena y el testimonio desgarrador de Shari Franke
En octubre de 2023, Shari advirtió sobre los peligros éticos y financieros del “vlogging” familiar y la explotación infantil en redes sociales. (Crédito: Instagram/sharilfranke)
Ruby y Jodi Hildebrandt fueron arrestadas y enfrentaron cargos de abuso infantil agravado. Ambas mujeres fueron condenadas a largas penas de prisión. Durante el juicio, Ruby admitió haber causado las lesiones y maltratos a sus hijos, aunque culpó a Hildebrandt por manipularla. “Nunca dejaré de llorar por haber herido sus tiernas almas”, dijo Ruby en un emotivo momento de su declaración.
Shari, la hija mayor, quien había sido testigo de los abusos, publicó un libro en el que detallaba su experiencia. En sus memorias, Shari relató cómo Ruby había manejado su vida familiar como una “productora de Hollywood”: “Me alegró que todo terminara como terminó. Haré lo que pueda para asegurarme de que permanezca en prisión. No pienso volver a verla. Nunca más”, dijo Shari en una entrevista con The Guardian.
“La casa de mi madre: la búsqueda de libertad de una hija”, detalla los años de abuso físico y psicológico que Shari y sus hermanos sufrieron en manos de Ruby Franke y Jodi Hildebrandt. (Crédito: Instagram/sharilfranke)
El caso de los Franke no solo generó conmoción, sino que también impulsó nuevas leyes en Utah. A raíz de los abusos ocurridos, el gobernador Spencer Cox firmó una ley que permite eliminar el contenido digital de los menores de edad en plataformas como YouTube, una medida impulsada por Kevin Franke, quien expresó su arrepentimiento por haber permitido que sus hijos fueran grabados y explotados en línea. “Los niños no pueden dar su consentimiento informado para ser filmados en redes sociales”, declaró Kevin ante los legisladores.
En resumen, la historia de Ruby Franke y su caída de youtuber exitosa a criminal convicta resalta el peligro de la exposición infantil en plataformas digitales.