Un dramático hecho de inseguridad sacudió el mediodía la localidad de Mariano Acosta, partido bonaerense de Merlo. Dos motochorros que acababan de cometer un asalto en un comercio mayorista fueron atropellados por el propio dueño del local, un joven de apenas 19 años, quien, tras ser alertado por un empleado, embistió con su camioneta a los delincuentes mientras escapaban.
El hecho ocurrió cerca del límite con Marcos Paz. Según informaron fuentes policiales, los delincuentes armados irrumpieron en el comercio, redujeron a uno de los trabajadores a punta de pistola y se llevaron dinero en efectivo junto a una caja de cigarrillos. Posteriormente, escaparon a bordo de una motocicleta Yamaha 125cc de color azul.
El dueño del negocio, que llegaba al lugar conduciendo una camioneta Mercedes Benz Sprinter, fue avisado por su empleado del asalto y, al divisar a los ladrones huyendo, decidió actuar. Realizó una maniobra y logró atropellarlos, provocando que ambos salieran despedidos hacia la vereda, junto a la moto. Todo quedó registrado en las cámaras de seguridad de la zona.
Intentó escapar y fue reducido por los vecinos
Vecinos que presenciaron la escena se acercaron rápidamente, sin conocer inicialmente el trasfondo del hecho. Minutos después, un llamado al 911 permitió la intervención del Comando de Patrullas de Merlo y el Grupo Táctico Operativo (GTO), quienes llegaron al lugar y hallaron a uno de los sospechosos herido en el suelo y al otro reducido por los vecinos tras intentar escapar a pie.
Los delincuentes fueron identificados como Leonel Eduardo Gabriel Otazo (32 años) y Brandon Contreras (21 años). En su poder, la Policía incautó dos revólveres: uno calibre .32 con numeración suprimida y un proyectil percutado, y otro calibre .22 marca Galands con ocho proyectiles intactos, ambos con números de serie adulterados. También llevaban una mochila con el dinero y los cigarrillos robados.
En cuanto al estado de salud de los detenidos, Otazo sufrió traumatismo de cráneo y fractura de rodilla derecha, y fue trasladado al Hospital Héroes de Malvinas, donde permanece internado bajo custodia policial, fuera de peligro. Contreras no sufrió heridas graves y quedó alojado en la comisaría.
La investigación quedó a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°3 de Morón, con los fiscales Valeria Courtade y Mario Ferrario. Ambos delincuentes fueron imputados por “robo agravado por el uso de arma de fuego” y “portación ilegal de arma de fuego de uso civil”.
Respecto del joven comerciante que protagonizó el atropello, fuentes judiciales indicaron que, por el momento, no se tomó ninguna medida en su contra. Además, se dispuso una consigna policial en el comercio para preservar su seguridad tras el violento hecho.
El video del momento de la embestida se viralizó rápidamente en redes sociales, despertando un intenso debate sobre la legítima defensa y las reacciones frente a los episodios de inseguridad que afectan a comerciantes del Conurbano bonaerense.