Un gol tempranero para abrir el marcador
El 0-0 duró un suspiro. A los 110 segundos de comenzado el compromiso, Rico Lewis disparó a puerta desde la medialuna del área e hizo delirar a los suyos cuando la pelota entró rozando el palo, en lo que significó la apertura del marcador. Este duro y madrugador golpe estuvo seguido de un dominio prácticamente hegemónico del Manchester City en los 20 minutos posteriores.
Nico Domínguez y Bernardo Silva, al acecho de la pelota. (FOTO: EFE).
Nottingham Forest ensayó algún que otro ataque promediando la recta final de la mitad inicial, aunque eran apenas atisbos o amenazas desactivadas con facilidad. La posesión de la pelota comenzó a repartirse más, pero los de rojo no pudieron encontrar la vía a la igualdad en los primeros 45′.
Comienzo dinámico del segundo tiempo
Los Reds casi lo consiguen en el alba del complemento: Elanga recibió un centro rasante y quedó solo contra el arquero, pero su remate se fue desviado. Tres minutos después, Matz Sels tuvo que recurrir al uso de sus piernas para evitar el segundo, luego de que un disparo cambiara de trayectoria. Sin embargo, retrasó esto apenas una jugada más: del corner que nació a raíz de la salvada, llegó el 2-0 tras un buen cabezazo de Gvardiol.
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