El próximo jueves, el ciclo de charlas organizado por diario El Tribuno, “Hablemos de lo que viene”, presentará una edición dedicada a uno de los temas centrales de la agenda global: el rol de la minería en la transición energética. El encuentro, que se desarrollará en el Centro de Convenciones de Limache, reunirá a especialistas y referentes del sector para debatir sobre el presente y futuro de esta industria en el nuevo escenario mundial.
La transición energética es el proceso mediante el cual los países y las industrias buscan sustituir progresivamente los combustibles fósiles por fuentes de energía limpias y renovables, como la solar, la eólica o la hidroeléctrica. Este cambio de paradigma requiere minerales ya considerados críticos. Organizaciones como la Agencia Internacional de Energía (IEA) proyecta que la demanda de minerales como cobre, litio, plata, níquel y tierras raras podría duplicarse o incluso cuadruplicarse hacia 2040.
Se estima que la mitad del crecimiento en el uso de estos minerales en las próximas dos décadas estará impulsado por la electrificación del transporte y el almacenamiento de energía.
En este contexto, Salta se proyecta como uno de los distritos más relevantes para el desarrollo de la minería sustentable en Argentina, gracias a sus proyectos de litio, tres de los cuales ya se encuentran en etapa de producción y expansión; de cobre, con Taca Taca como emblema; y de plata, con el proyecto Diablillos en etapa avanzada, previa a la construcción de la mina, al que debe sumarse El Quevar.
Proyectos de litio
Más allá de que el mercado internacional del litio se encuentra en un periodo de baja, este metal sigue siendo fundamental para el camino energético que emprendió el mundo. Por lo que las proyecciones indican que el panorama en este sector mejorará. En esa línea, el litio salteño ocupará un rol central. Hay tres minas que ya están en producción:
Centenario-Ratones: la primera mina de litio en entrar en producción en Salta y cuarta del país. Su planta comercial esta ubicada en el Salar Centenario- Ratones, se inauguró en julio de 2024, y en la última semana de diciembre la empresa a su cargo, Eramine, de capitales franceses, anunció la primera producción de carbonato de litio.
Sal de Oro: planta pionera en hidróxido de litio, se puso en marcha en el Parque Industrial de General Güemes en octubre de 2024, se considera la de mayor envergadura en Latinoamérica. Está a cargo de la compañía surcoreana Posco. Se abastece de una primera etapa de producción de fosfato de litio en el yacimiento ubicado en la zona de cooperación del Salar Hombre Muerto, entre Salta y Catamarca, donde también se erige una nueva planta de carbonato de litio, en construcción.
El yacimiento, ubicado en Tolar Grande, cuenta con una producción proyectada de 250.000 toneladas de cobre anuales.
Mariana: a cargo de la minera china Ganfeng Lithium. Su planta de procesamiento de cloruro de litio ubicada en el Parque Industrial de General Güemes empezó a producir en febrero pasado. Se abastece de la mina ubicada en el Salar de Llullallaico.
Por otra parte, la minera Rio Tinto, de capitales británicos y australianos, está a punto de iniciar la producción en el proyecto Rincón Litio, ubicado en el salar Rincón. Arrancará una primera etapa de producción de 3.000 toneladas anuales de carbonato de litio. Mientras que la multinacional anunció una inversión de US$2.500 millones destinada a ampliar su capacidad productiva para alcanzar hasta 60.000 toneladas anuales.