“Generación Colapinto”: la historia de los emprendedores sub-20 que consiguieron casi USD 3 millones y quieren triunfar en EEUU

0
39
La “Hacker House” de Sirvana en Belgrano. Allí viven y trabajan los emprendedores detrás de la startup (Adrián Escandar)

“Vamos a ser más la empresa más grande del mundo”. Santiago Ruberto hace una pausa y sonríe levemente. Si el interlocutor algo sorprendido espera un chiste o una aclaración sobre el pronóstico, no llegará. Este joven de 19 años está convencido de que su startup puede seguir los pasos de Google, la empresa que es sinónimo de internet y que tiene un valor de mercado de casi 2 billones de dólares.

“No queremos ser el próximo Mercado Libre, queremos ser el Google que viene. Queremos ser muy grandes”, repite, por si había quedado alguna duda.

Santiago y sus socios Mateo Zárate (20) y Valentín Ratti (25) pasan días frenéticos en una casona de Belgrano R, donde viven y trabajan. “Hacker house”, la llaman. Hay banderas piratas decorando la coqueta casona de la calle Melián y referencias a íconos tech, como Steve Jobs, por todos lados. Flotan en el aire entusiasmo, ambición, audacia y espíritu de garage para hacer una empresa de impacto global. Quienes invierten en ellos destacan su enfoque, su inusual capacidad de ejecución y hablan de una suerte de nueva “Generación Colapinto” emprendedora, para buscar un paraleismo deportivo con lo que joven corredor de F1 representa.

Hijos de familias de clase media, hasta hace muy poco Santiago y Mateo eran compañeros de secundaria y vivían en Paraná, Entre Ríos. ¿Serán el próximo Google realmente? ¿Llegarán? Quién sabe. El camino es largo y arduo, pero es evidente que les sobra confianza. Mientras tanto, mal no les va a estos emprendedores argentinos sub20 (o sub25 si se toma en cuenta a Valentín con quienes los entrerrianos se asociaron este año): en las próximas horas cerrarán una nueva ronda de inversión con la que levantarán fondos por un total de casi USD 3 millones en apenas unos meses.

Detrás de ellos hay importantes empresarios, fundadores de unicornios locales y fondos de inversión de Argentina y Silicon Valley. Pero no están solos. La “Generación Colapinto” crece con la impronta de ir por negocios globales, usar como nunca la inteligencia artificial para escalar y aprovechar el viento de cola local que prometen la salida parcial del cepo y la estabilización de la macro.

A Silicon Valley

El proyecto de Santiago, Mateo y Valentín se llama Sirvana, pero no importa. Va a cambiar de nombre muy pronto, cuando lo lancen en Estados Unidos. Además, están esperando las visas de trabajo para mudarse “ya” a San Francisco, en California, a la zona que es la meca tech de EEUU. Creen que en no más de dos meses deberán armar las valijas.

Mateo Zárate, Santiago Ruberto y Valentín Ratti (Adrián Escandar)

“Sirvana muestra todos los productos de todas las tiendas de la web en un solo lugar”, resumió Ruberto.

“Buceamos en toda Internet, a gran escala, y traemos todo. No hay nada parecido en el mundo. Hace mucho tiempo existía Yahoo Directory. Si entonces yo quería saber cómo había salió Patronato, el club de mi ciudad, por ejemplo, tenía que entrar a Yahoo, ir a Directory, Noticias, después a Deportes, abrir una página, buscar y si no estaba, volver a abrir otra y así. Google ganó cuando apareció y dijo ‘escribí acá lo que quieras buscar y listo’. Hacemos eso mismo para productos de todos los ecommerce, marketplaces y tiendas grandes, medianas y chicas. Sirvana muestra todo”, dijo.

Por ahora ofrecen indumentaria y calzado por una cuestión de foco inicial, pero planean hacer lo mismo con todo tipo de productos. El business plan de Sirvana dice que nunca le van a cobrar a nadie, ni personas ni comercios: es un modelo a largo plazo que se sostendrá con publicidad dirigida. Tampoco van a pedir permisos. “No hace falta: somos un intermediario inteligente, nada más. Redirigimos compras, no les sacamos nada a los comercios. Al contrario, les llevamos clientes. Ordenamos. Hacemos más fácil que se encuentren los productos… como Google con las búsquedas”, aseguró el emprendedor.

— ¿Cómo usan la IA?

— Creamos un robot de inteligencia artificial que indexa de manera automática todos los productos de la web y los clasifica. En una segunda etapa vamos a resolver también la compra: el robot hará todo y el usuario podrá comprar en distintos lugares usando solo nuestro carrito. Son agentes de IA que van a resolver las transacciones. Los usuarios pueden buscar con imágenes y lenguaje natural, de manera muy intuitiva.

“No queremos ser el próximo Mercado Libre, queremos ser el Google que viene. Queremos ser muy grandes” (Ruberto)

— ¿En qué instancia del proyecto están?

— Venimos trabajando hace más de un año. Somos cuatro viviendo en la Hacker House. Trabajamos todo el día los tres fundadores y un empleado, Luciano Peretti (27). Todo está funcionando muy bien y con cero marketing. Redireccionamos unas 40.000 compras este año y la app terminó 2024 como la tercera en descargas en la sección Shopping del App Store, después de Mercado Libre y Alibabá, pero arriba de Amazon. Ya tenemos lista la versión para Android.

— ¿Cómo sigue la historia?

— Nos vamos todos a vivir a San Francisco. Allá va a ser más fácil porque en EEUU se construye el tipo de empresa gigante que queremos ser. Vamos a cambiar el nombre, lanzar la plataforma y luego sumar a todos los productos de la web. Estamos buscando el nombre para el relanzamiento, que será a comienzos del mes que viene. Sirvana [un nombre de fantasía que surgió del libro El monje que vendió su Ferrari] no suena bien en inglés. La empresa no genera ingresos aún, pero los tendremos a comienzos de 2026. Será clave el lanzamiento en EEUU.

Santiago y Mateo, que fueron compañeros de secundario, empezaron a estudiar en la UTN de Santa Fe, pero con la primera inversión dejaron la facultad para dedicarse de lleno al proyecto y se mudaron a CABA. El estudio quedará para otro momento, aseguran. Son autodidactas de la programación: algún curso en Paraná y mucho Youtube y redes para aprender.

“La idea nació porque todos tuvimos problemas diferentes que llevaban a la misma solución. Mi vieja es profesora y periodista y me insistía mucho con que leyera en inglés. En el último año de secundario, me propuse leer un libro por semana relacionado con Silicon Valley. No los encontraba: quería el libro, no sabía en qué lugar comprarlo. A la mamá de Mateo le pasó lo mismo con la compra de un auto, a Valentín igual con el supermercado y a otros amigos con ropa. Todos queríamos encontrar las cosas, sin importar quién era el vendedor. Funcionó muy rápido”, detalló Ruperto.

Martín Migoya y Marcos Galperin, referentes de Globant y Mercado Libre, los primeros unicornios argentinos

Mientras Sirvana nacía en Paraná, en CABA Valentín tenía una idea similar y la estaba plasmando. Se conocieron por X, hubo buena onda de entrada y se propusieron trabajar juntos. Viajaron a San Francisco un mes y conectaron. Este año unificaron proyectos y se convirtieron en socios. Valentín, que se recibió, es el CTO; Mateo se encarga del producto y Santiago es el CEO. Los inversores les dijeron que alguno debía enfocarse en pensar en el proyecto a nivel general y aprender a levantar capitales, y tomó ese rol.

Ecosistema

Argentina tiene 12 unicornios, empresas de base digital o tecnológica que alcanzaron la valoración “mágica” de USD 1.000 millones. Algunos tienen negocios fluctuantes y otros se vendieron, pero todos fueron hechos en el país o por argentinos. Son Mercado Libre, Globant, Despegar, OLX, Auth0, Ualá, Vercel, Tienda Nube, Bitfarms, Aleph, Mural, Technisys.

Inversores globales y emprendedores de todas las regiones reconocen el talento y también la “cintura” de los argentinos para surfear los problemas que enfrentan las startups. Hasta el presidente Javier Milei aseguró en su discurso del 1 de marzo que “por algo somos el país con más unicornios tecnológicos per cápita de la región aún con la menor inversión. Imagínese cómo nos puede ir con el viento a nuestro favor”. Las perspectivas de un nuevo contexto económico parece encaminar las posibilidades del sector.

Desde Argencom, la cámara local de exportadores de servicios, aseguraron que las últimas medidas del Gobierno “tienen un impacto positivo en las perspectivas de negocio de las empresas de la Economía del Conocimiento argentina”.

En la última “Encuesta de Perspectivas 2025″, que la entidad realizó en marzo, la mayor expectativa de las empresas se centraba en la salida del cepo y la normalización del régimen cambiario. Economía del Conocimiento es el cuarto rubro exportador del país, un 9,2% del total nacional, con más de USD 8.000 millones (según datos oficiales adelantados, con un crecimiento del 15,5% en 2024). “Sin embargo, según la OMC, la participación de Argentina en las exportaciones globales de servicios basados en el conocimiento cayó del 0,37% en 2010 al 0,25% en 2023″, advirtió Argencom.

“La salida del cepo tiene un impacto directo y relevante sobre la economía y el ecosistema emprendedor argentino. Constituye una condición necesaria para sentar las bases de un entorno más previsible, donde las startups puedan planificar, escalar y atraer inversión con mayor confianza”, detalló Julia Bearzi, CEO de Endeavor Argentina, la red de emprendedores de alto impacto que reúne y de donde salieron la mayor parte de los unicornios locales.

Del programa Scaleup de Endeavor participaron recientemente otras startups, algunas con sobrada chapa de posibles éxitos y muchas de ellas con negocios más avanzados. Por caso, los rosarinos de DeepAgro, que aplican IA al campo; la fintech de pagos digitales Tapi, que ya consiguió USD 30 millones; la cordobesa Kilimo, con foco en el campo y soluciones de “climatech” para la región; Atlas, de reclutamiento de talento; y Darwin AI, para automatización de atención al cliente y procesos de ventas (en su última ronda levantaron USD 2,5 millones). Son muchas más en todo el país.

El ecosistema emprendedor tech local siempre es muy activo, más allá de los vaivenes de la economía, pero ahora es evidente que está en ebullición.

Otra de las empresas que pasaron por el programa es Moova, que se dedica a logística de próxima generación, ya está presente en 11 países y es respaldada por Toyota Tsusho, FJ Labs, Wayra Telefónica y Alaya Capital, entre otros. Moova acaba de desembarcar en España con la compra de Vonzu con una inversión de 3,6 millones de euros.

“El ecosistema emprendedor en la región está atravesando una etapa de madurez forzada, con menos hype, y más foco en negocios reales. El capital no desapareció, pero se volvió más exigente. Hoy se valora la eficiencia, la sostenibilidad del modelo y el camino claro hacia la rentabilidad. Hay más apertura en corporaciones tradicionales para adoptar tecnología, especialmente en logística, retail, servicios financieros y cadenas de suministro. La clave está en resolver problemas reales con tecnología bien aplicada y mirada regional. No es un momento fácil, pero sí un terreno fértil para quienes construyen con visión y los pies en la tierra”, aseveró Antonio Migliore, fundador de Moova.

Con foco en la “Generación Colapinto” y presencia de propio piloto de F1, Endeavor realizará una nueva edición de Experiencia Sub20, el 29 de abril en el Movistar Arena. Es un evento orientado a alumnos del último año del secundario que busca inspirar a los estudiantes a través de experiencias e historias como las de Franco, Nicki Nicole y otros emprendedores y referentes.

“Las medidas que tomó recientemente el Gobierno son muy positivas porque dólar oficial confluirá con el MEP y eso simplificará la compra de insumos y bienes importados, el acceso a servicios como los de la nube y el acceso a inversiones”, agregó Guibert Englebienne, cofundador de Globant.

“Va a beneficiar mucho a todos los emprendimientos argentinos que intenten exportar y habrá menos trabas para aquellos que quieran importar pudiendo reponer un stock más rápidamente o pudiendo proveer un precio más competitivo al público. Son cambios muy positivos y es sin duda un primer paso de más medidas que vendrán y que esperamos”, explicó el empresario.

Mariano Mayer, ex secretario de Pymes y Emprendedores durante el gobierno de Cambiemos y actual presidente de la Asociación Argentina de Capital Privado, Emprendedor y Semilla (Arcap), coincidió con que las señales de normalización macroeconómica potenciarán al ecosistema. “Las medidas permiten una mayor previsibilidad en el ingreso y retiro de capital, y mejoran la competitividad del país como destino de inversión. Esto no solo beneficia al capital emprendedor (venture capital), sino que también crea condiciones más favorables para inversiones en private equity, infraestructura y financiamiento de largo plazo. Si bien el impacto más visible se dará en el mediano plazo, es esperable una reactivación de rondas hacia la segunda mitad de 2025, con una aceleración más clara en 2026, siempre y cuando las reformas se profundicen y consoliden”, afirmó.

Desde Arcap ven especial potencial en sectores con perfil exportador y alto valor agregado, como fintech, agtech, salud digital, biotecnología, oil & gas y minería.

Con respecto al desarrollo puntual de industria de software, Sergio Candelo, economista y COO de Snoop Consulting, destacó que resulta imperativo abordar la problemática de los impuestos distorsivos que afectan al sector. “Cargas como el Impuesto al Cheque a nivel nacional y los Ingresos Brutos provinciales erosionan la competitividad internacional de nuestras empresas. Su eliminación o reducción permitiría operar con mayor eficiencia, invertir en innovación y talento, y competir en igualdad de condiciones con empresas de otros países”, dijo.

Inversores y consejeros

Las paredes de la casa de Sirvana en Belgrano están repletas de referencias emprendedoras: las biografías de Steve Jobs y Bill Gates a mano, posters de San Francisco, Facebook e imágenes de la icónica campaña Think different de Apple, en los 90, con fotos de Einstein, Edison, Mandela y John Lennon. Corona la escena el logo futbolero de Patronato, en equipo más representativo de Entre Ríos.

Hasta ahora el proyecto levantó 615.000 dólares. Todo comenzó con desembolsos de inversores ángeles, como Diego Pando, fundador de Bumeran, Digital House y muchos otros proyectos; y Borja Martel Seward, uno de los fundadores de la empresa cripto Lemon.

Diego Pando, inversor ángel de Sirvana

Martel Seward se retiró del día a día de Lemon y avisó en X que estaba dispuesto a mentorear a emprendedores. Santiago le respondió y vinieron a verlo a CABA, en septiembre de 2023. La inversión no se dio hasta 6 meses después, cuando Santiago regresó de estudiar inglés en San Francisco (resignando el viaje de egresados a Bariloche) y donde tocó puertas de varios fondos de inversión con poco éxito concreto.

Después de Pando y Martel Seward se sumaron Sullyen Almeida, socia del fondo brasileño Monashees, y Leandro Pisaroni, de Kalei Ventures. Y luego el fondo local Newtopia y Broom Ventures, de Silicon Valley. Newtopia está integrado por Patricio Jutard (Mural), Sacha Spitz (Yavu Ventures), Juan Pablo Lafosse (AlMundo y TravelX), Jorge Aguado y el mencionado Mayer.

Justamente Mayer es quien hizo referencia a la “Generación Colapinto” y destacó el empuje, la impronta y el trabajo en colaboración de emprendedores jóvenes como los que están al frente de Sirvana. “Pueden tener un impacto enorme. Combinan visión muy clara y consistencia, pero con humildad para dejarse ayudar. Tiene una madurez que sorprende para su edad con una sanísima cuota de desparpajo. Salvando las distancias, esta camada me hace acordar un poco a Franco Colapinto. Muy jóvenes, talentosos, audaces y con ganas de comerse el mundo”, resumió. No resulta casual que empresas grandes como YPF, Globant y Mercado Libre están muy cerca de Colapinto y de artistas como Bizarrap.

En medio del torbellino, Sirvana está cerrando una nueva ronda de USD 2 millones, de la que prefieren no dar mayores datos, pero que encabeza otro fondo de inversión de EEUU. Sus fundadores siguen sin poder creerlo, igual que hace un año con los primeros desembolsos destinados a hacer despegar el proyecto. “Un día estábamos dibujando ideas en una pizarra y al otro teníamos USD 150.000 en una cuenta. ¡No sabíamos qué carajos hacer!”, recuerda Ruberto.

— ¿Y qué hicieron?

— Fuimos muy, muy conservadores. Nos invirtieron y gastamos sólo USD 2.000 en tres meses. Comíamos arroz todos los días. Teníamos miedo de gastar. Conocimos a buena parte de los creadores de unicornios locales que nos aconsejaron y ayudaron. Charlas con temas que para nosotros no eran intuitivos, pero que fueron muy importantes: préstenle atención a esto, acá no escatimen, cuidado con tal cosa, acá tienen que ser más agresivos y en esto no; salgan a levantar fondos en este momento, en este, no; y así.

— ¿Qué consejo te marcó más hasta el momento

— Un inversor de Sequoia, el fondo más grande del mundo, me dijo en San Francisco que mi trabajo como CEO y fundador era aprender y escuchar, pero también saber que yo manejo la empresa. Que debo confiar en mi intuición y en los conocimientos que tengo del proyecto. Nos aconsejaron mucho levantar más fondos de entrada y no lo hicimos. Salió bien eso porque no queríamos diluirnos, contratar de más y sumar complejidad. Guillermo Rauch, fundador de Vercel, nos ayudó mucho también en ese proceso. Lo mismo de los fundadores de Globant, Auth0 y Tienda Nube.

Santiago Ruberto, CEO de Sirvana (Adrián Escanda)

— ¿Te divertís?

— Mucho.

— ¿Y te estresás?

— Sí, pero no hay nada que preferiríamos estar haciendo que no sea esto. Nos da mucho placer trabajar juntos, estar en contacto con personas muy inteligentes, recibir consejos de emprendedores exitosos y saber que estamos detrás de una meta difícil que es nuestro gran sueño. Estamos felices.

— ¿Qué dicen tus padres?

— A mi viejo le encanta… y a mi mamá le costó más que no fuera a la universidad. Los dos se interiorizan y me apoyan.

— ¿Cómo ves a Argentina?

— De economía no sé mucho, pero veo que hay optimismo por poder avanzar y sacar trabas para el ecosistema. Eso está bueno.

— ¿Qué soñás para Sirvana, o como se llame, en 10 años?

— Imagino una empresa que nos trascienda. Miramos el largo plazo y no queremos hacer otra cosa. Imagino teniendo varios productos dentro de Sirvana, como los tienen Google o Apple. No es chiste: queremos ser la empresa más grande de la historia argentina. Podemos hacerlo.

Fuente: https://www.infobae.com/tag/policiales

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí