Cada vez que un niño espera un órgano la vida se detiene en una pausa angustiante. El entorno familiar se desmorona, pero al mismo tiempo lucha y pone todas sus fuerzas para comenzar un proceso de espera que puede salvar a los menores de edad que tienen tanta vida por delante.
En 2024, se realizaron 308 trasplantes pediátricos en Argentina (206 de órganos y 102 de córneas) . Menos del 2% de la lista de espera nacional corresponde a pacientes pediátricos, alrededor de 200 niños y niñas en todo el país, lo que significa que nuestros chicos siguen esperando.
La donación pediátrica no es solo un acto médico, es un compromiso social y ético.
El año pasado Argentina alcanzó un récord con 4.263 trasplantes realizados gracias a 1.972 procesos de donación. Este avance es significativo, pero sigue siendo insuficiente para cubrir la demanda pediátrica.
Como Senador Nacional con la posibilidad de poder colaborar con normativas de alcance federal, comencé a preocuparme por el tema cuando conocí a Soledad, la mamá de Tomi: un niño que con solo dos años padecía insuficiencia renal crónica y necesitaba de una trasplante de riñón para poder seguir adelante con su vida. Ella me inspiró con su lucha diaria y decidimos presentar un proyecto de ley para incentivar la donación pediátrica.
¿Cómo? Buscamos que las familias expresen su voluntad de donar cuando realizan trámites ordinarios ante el RENAPER, Registros civiles, centros sanitarios y el Correo Argentino. De esta manera intentamos facilitar este acto generoso y solidario, y evitar que decisiones tan trascendentales se vean condicionadas por el dolor del momento. Creo que es fundamental que sigamos avanzando en políticas que promuevan la solidaridad y el compromiso con la vida de quienes más lo necesitan.
Cada potencial donante es una oportunidad de más y mejor vida. Es realmente importante que podamos volver a creer en lo colectivo y que como sociedad comprendamos la urgencia de este tema y actuemos en consecuencia. Donar, sin dudas, es dar vida. No dejemos que nuestros niños sigan esperando.