La provincia de Tucumán se encuentra conmocionada tras el hallazgo sin vida de una niña de siete años en el río Lules, sobre la ruta provincial 301. La menor había sido reportada como desaparecida en la madrugada del domingo por su madre, Daniela Ávila, de 24 años, quien alertó a la Policía sobre su desaparición mientras caminaban por la zona del puente.
Según informó el diario La Gaceta, la denuncia se registró alrededor de las 5.30, cuando la madre de la niña indicó que perdió de vista a su hija, aunque no pudo aportar detalles concretos sobre las circunstancias. En el momento de su desaparición, la pequeña vestía una musculosa rosa, un short de jeans celeste y zapatillas deportivas rosas y grises.
Ante la denuncia, se desplegó un amplio operativo de búsqueda y rescate que incluyó efectivos de la Policía de Tucumán, Defensa Civil, la Motorizada 911, agentes municipales y unidades del servicio de emergencias 107. Horas más tarde, la peor noticia se confirmó: el cuerpo de la niña fue encontrado sin vida en la zona del río.
La Unidad Fiscal de Homicidios de la capital tucumana, a cargo de Pedro Gallo, tomó intervención en el caso y ordenó la aprehensión de la madre y el padrastro de la víctima, ambos radicados en Lules. Según fuentes judiciales, el Ministerio Público Fiscal (MPF) inició una serie de peritajes en la escena con la colaboración de la Policía Lacustre y el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF).
“Estamos realizando un abordaje amplio. Se tomaron muestras de la madre y el padrastro, además de declaraciones testimoniales. Todavía estamos trabajando para determinar las causas de muerte. Con el reconocimiento médico y la autopsia podremos esclarecer el fallecimiento”, explicó el fiscal Gallo..
Mientras avanzan las pericias, la comunidad de Lules sigue en vilo a la espera de mayores precisiones sobre este trágico caso que ha generado un profundo impacto en la provincia.