Hay muchos a quienes les llaman la atención los festejos de la población palestina en Gaza por la falaz e ilusoria victoria de Hamas y, por otro lado, la mezcla de alegría y tristeza en la población israelí por la tregua alcanzada y la posibilidad del regreso a cuentagotas de los secuestrados vivos y muertos por el accionar criminal de esa demoníaca agrupación en complicidad con gran parte de los gazatíes.
Sinceramente, no debe ser objeto de sorpresa.
Los judíos valoramos la vida como principio rector, mientras que los fanáticos del terror de Hamas, la Jihad Islámica, Hezbollah, los Huties e Irán priorizan la muerte y el asesinato.
Hoy, el mundo judío vive esta tregua con la esperanza de recuperar a todos los secuestrados para que puedan volver a sus hogares, sanar y retomar su vida o, al menos, en aquellos casos que se recuperen los que fueron asesinados, que sean recibidos por sus familiares y todo el pueblo de Israel, para ser enterrados en su tierra con la dignidad que se merecen.
Por otra parte, los judíos sentimos en contraste la tristeza de tantas vidas perdidas desde el 7 de octubre de 2023, entre las que se encuentran los jóvenes soldados que protegen el Estado de Israel que sacrificaron sus vidas por su país y por todos los judíos de la diáspora, y la sensación de que todavía no se han concluido los objetivos de esta guerra.
Por mi parte, me quedo con nuestros sentimientos.
“Quién salva una vida, salva el mundo entero”, dice nuestro Talmud, y el Estado de Israel muestra su fortaleza y su resiliencia, suspendiendo temporalmente algunos objetivos militares por una misión santa: recuperar a cada uno de los suyos.
Hoy celebramos que tres hijas de nuestro pueblo ya están en casa, con la esperanza de que pronto será el destino de los 94 secuestrados restantes.
Por lo demás, el tiempo sabrá juzgar con objetividad cuán grande es la derrota de los enemigos de Israel. Les aseguro que la derrota de Irán y sus proxis ha sido grandilocuente.
Prontamente, veremos con claridad un Medio Oriente con nuevas perspectivas y donde Israel ocupará el lugar central.
No tengo la menor duda de que Israel y el pueblo judío prevalecerán.
Am Israel Jai!