A días de la última detención, otro policía de Córdoba fue arrestado por abuso sexual agravado. Así, la lista de oficiales detenidos asciende a cinco en las últimas dos semanas. La víctima es una mujer mayor de edad.
Pese a que su identidad no trascendió, se trata de un sargento perteneciente a la comisaría de Monte Cristo, quien fue denunciado por atacar sexualmente a una mujer. Frente a esto, el fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual de feria, Juan Ávila Echenique, ordenó su detención durante la jornada del martes y las autoridades procedieron a su arresto.
De acuerdo con la información a la que pudo acceder el medio local ElDoce.TV, la noticia fue confirmada por el Ministerio Público Fiscal a través de un comunicado, en el que precisaron que la víctima es mayor de edad. Sin embargo, no se brindaron más precisiones sobre el hecho.
Con la detención del sargento, la lista de agentes imputados de la Policía de Córdoba continúa en aumento. Tres de los cinco detenidos en este último tiempo están acusados por abuso sexual, mientras que los otros dos está acusados de otros delitos.
El primero de los uniformados detenidos es un sargento ayudante de la fuerza que fue arrestado luego de ser acusado de abusar sexualmente de una compañera de trabajo durante el horario laboral. La víctima es una empleada del sector de limpieza de la dependencia en la que trabajaba el acusado, quien lo denunció porque la habría amenazado con un arma para concretar el abuso.
Ya son cinco los detenidos en menos de dos semanas
El caso quedó en manos de la Fiscalía de Delitos Contra la Integridad Sexual, representada por el fiscal Juan Ávila Echenique. Entre las primeras medidas, no solo ordenó la detención del agente que cumplía funciones en la ciudad de Córdoba, sino que le otorgó un botón antipánico a la denunciante.
Horas después, un “suboficial que ostenta la jerarquía de agente, encontrándose el mismo en situación de tareas no operativas” fue detenido por un caso de violencia familiar. La denuncia en su contra fue formulada en diciembre del año pasado, pero no trascendieron detalles al respecto.
Así, a comienzos del mes de julio, la Fiscalía a cargo de la investigación ordenó la captura inmediata del agente siete meses después de que comenzara el proceso. Por este motivo, se determinó que fuera trasladado hacia la sede judicial que investigará su responsabilidad sobre el hecho. En consecuencia, el suboficial fue puesto en situación pasiva por decisión del Tribunal de Conducta de las Fuerzas de Seguridad hasta que se resuelva el caso.
Por otro lado, el martes 2 de julio detuvieron a un policía retirado por robarle a un taxista en el barrio Crisol Norte. Fue el propio chofer el que denunció al agente retirado tras trasladar al hombre y, al poco tiempo, darse cuenta que le faltaban sus pertenencias.
El cuarto arresto se llevó a cabo el jueves 5 de julio. La Fiscalía de Instrucción de Delitos Complejos, en manos de Valeria Rissi, dispuso la detención del uniformado durante la tarde del jueves. Tal como sucedió en otros casos, no trascendió su identidad, como tampoco el caso del que se lo imputa. De igual forma, se sabe que se encontraba en “situación de revista efectiva”.
Tras su detención, quedó a disposición de la Justicia. “En la faz administrativa intervino la Dirección General de Control de Conducta Policial que dio inmediata participación al Tribunal de Conducta de las Fuerzas de Seguridad, disponiendo el pase a situación pasiva del funcionario”, dice el comunicado en el que se informó su detención.
En este contexto, el ministro de Seguridad de Córdoba, Juan Pablo Quinteros, aseguró encontrarse preocupado por la cantidad de oficiales que fueron denunciados. “Nos preocupa cualquier accionar policial que esté contrario a la ley, pero nosotros no encubrimos absolutamente a nadie”, remarcó al señalar que todos los hechos fueron dados a conocer por la fuerza.
Los escándalos dentro de la Policía de Córdoba estallaron después de que un suboficial de Río Cuarto fuera detenido el pasado 28 de mayo por presuntamente haber abusado de una mujer que estaba detenida en la alcaidía de la Jefatura policial de la ciudad. Dos días después de la detención, el agente volvió a ser denunciado por otra mujer.