Historias en la Copa América: un héroe de Malvinas salteño hoy alentará a la Selección en Houston

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“Cuando le conté a uno de mis amigos que me venía a vivir a Houston, nos abrazamos y nos largamos a llorar. Es un recuerdo que tengo muy presente, como si fuera ayer”. Diego Copa dejó su Salta natal hace 24 años en plena crisis económica del país junto a sus padres y un hermano tres años más chico, pero la sangre le tira: tiene tatuajes, un restaurante con empanadas salteñas y asado y, por supuesto, verá a la Selección ante Ecuador en el NRG Stadium junto a su papá Héctor, héroe de Malvinas.

“Cuando le conté a uno de mis amigos que me venía a vivir a Houston, nos abrazamos y nos largamos a llorar. Es un recuerdo que tengo muy presente, como si fuera ayer”. Diego Copa dejó su Salta natal hace 24 años en plena crisis económica del país junto a sus padres y un hermano tres años más chico, pero la sangre le tira: tiene tatuajes, un restaurante con empanadas salteñas y asado y, por supuesto, verá a la Selección ante Ecuador en el NRG Stadium junto a su papá Héctor, héroe de Malvinas.

Noemí y Héctor tuvieron a Diego y Álvaro entre fines de los 80 y principios de los 90, pero a fines de esa última década, Argentina sufrió una de sus tantas crisis económicas, por lo que tuvieron que emigrar como otros miles de argentinos. ¿Por qué Houston? Porque dos de los hermanos del excombatiente de Malvinas vivían en esa ciudad norteamericana y ayudaron a su familia a mudarse.

Héctor Copa, el héroe de Malvinas que se transformó en chef y dueño de “Che Gaucho”.

“Mi tío Timoteo le sugirió que busque una alternativa y que mis tíos que vivían acá podían apoyar a mi viejo, también a gestionar una visa. Somos una familia muy creyente y después de días de oraciones, mis padres decidieron que íbamos a vivir en Estados Unidos. Una mañana me sentó y explicó lo que estaba pasando en el país. Yo, pese a tener 11 años, era un chico muy independiente que salía de clases y tomaba un colectivo para ir a la escuela de música, así que entendí lo que pasaba y lo apoyé”, dijo a El Tribuno.

Sin embargo, Diego tuvo que dejar a sus amigos y compañeros de escuela y no fue fácil. “Me acuerdo que en esa época a veces nos pirábamos de la escuela para ir a ver los partidos de la Copa Libertadores de Boca junto a mi gran amigo Ezequiel Burela. Lo menciono porque fue al primero que le conté que me venía. Fuimos a un aula antes de la clase de coro, nos abrazamos y nos largamos a llorar. Me acuerdo como si fuera ayer”.

Álvaro y Diego junto a sus padres Héctor y Noemí.

El atentado del 11-S frenó los pasos laborales de Héctor

Con la llegada al estado de Texas, Héctor hizo los trámites para trabajar con un importante curriculum: había prestado servicios para Dinar Líneas Aéreas, pero con los atentados del 11 de septiembre de 2001, los documentos quedaron en pausa.

“Comenzaron otros procesos legales. Mi viejo tuvo que buscar otras cosas, junto a mi mamá habían dejado mucho para que mi hermano y yo estemos mejor. Fui a la universidad, me recibí de contador y hoy manejo empresas, además de ser entrenador de fútbol. Durante un tiempo trabajé en ambas profesiones y ahorré para hacerles algo a mis viejos y tener un lugar que les pertenezca. Mi mamá hace empanadas espectaculares y mi viejo es un maestro en la parrilla, entonces pusimos ‘Che Gaucho’, un restaurante (adaptado con dibujos regionales) en la zona de Tomball, en 2017”.

Diego es contador y entrenador de fútbol.

Con las empanadas salteñas y el asado argentino como platos clave, Héctor y Noemí pudieron dedicarse a la gastronomía. “Desde entonces la gente comenzó a venir, especialmente argentinos y otras familias locales a apoyarnos. En esta zona a los americanos les gusta mucho probar diferentes comidas”.

Un hermoso gesto que se multiplicó

Meses después de abrir las puertas de Che Gaucho, por la zona pasó el huracán Harvey causó 68 muertes y cientos de afectados. Como creyentes que son, los Copa decidieron apoyar a los perjudicados y ese gesto se valoró en la ciudad. “Gracias a Dios no nos afectó a nosotros ni a nuestro restaurante y pudimos utilizar ese lugar para bendecir a personas que lo necesitaban. Lo hicimos sin tener algún beneficio, pero los vecinos comenzaron a apoyarnos y crecimos mucho”.

Diego tiene varios tatuajes y cada uno de estos tienen su significado: “Tengo a la Fragata Libertad en homenaje a mi viejo porque él fue trupulante. Además tengo un mapa con la salida de Salta hacia Houston, una brújula y un proverbio que habla de sabiduría y también al Diego (Maradona)”.

Diego Copa pudo ver a la Selección campeona del mundo en el país junto a miles de argentinos.

“Le regalamos la entrada a mi viejo gracias a los chicos de un programa de televisión que se emocionaron con su historia y estamos camino a la cancha”, comentó el salteño, quien pudo estar presente en Argentina el 18 de diciembre de 2022 cuando la Selección se consagró campeona del mundo en Qatar y festejó junto a miles de compatriotas en el Obelisco porteño.

Fuente: https://www.eltribuno.com/salta/seccion/policiales