La llegada de los detenidos por la desaparición de Loan Peña: María Victoria Caillava, Carlos Pérez, Antonio Benítez, Mónica Millapi y el comisario Walter Maciel a la provincia de Salta no pudo hacerse entre gallos y medianoche debido a la férrea presencia de mujeres, periodistas y algunos vecinos, quienes montaron una implacable guardia bajo el frío raso hasta la llegada del convoy federal.
A pesar de las estrictas medidas de seguridad, que incluyó drones para controlar el ingreso del convoy federal al penal, en el silencio de la madrugada y sin los flashes de las cámaras los detenidos escucharon un alarido de mujer, que les recordó que no eran bienvenidos a tierra gaucha.
Quizá en nombre de todos se escucho “hijos de p…; y ese grito rompió el hielo del silencio y se convirtió en el plus de la noche. Veinte horas esperaron en el frío varias mujeres solo para recordarles a propios y extraños que General Güemes no se siente a gusto con ellos.
La interminable jornada que comenzó el día 27 en horas de la mañana concluyó el viernes 28 a las 5.20, cuando el furgón cruzó la barrera construida por el municipio e ingresó a tierras federales del penal número 3.
Antes, se supo los abogados de los detenidos intentaron boicotear la resolución de la justicia y evitar el traslado presentando hábeas corpus en juzgados de Corrientes fundados en la lejanía del traslado con respecto a sus familias. En tanto, el comisario Maciel sugirió -a través de su defensa- que corre riesgo su vida en General Güemes, dijeron fuentes.
Seguridad, urgente
En tanto, y mientras el pueblo de General Güemes esperaba la llegada de los cinco detenidos a penal federal y les quería acercar muchas cosas se dijeron barrera hacia afuera. Pero no solo lo dijeron los vecinos, la mayoría mujeres, también lo sugirió el intendente de esa ciudad Carlos Rosso, quien fue claro y elocuente a la responsabilidad que tiene el municipio en mantener la zona de influencia del penal con la seguridad que los ciudadanos se merecen.
El alcalde dijo que colabora incansablemente con el mantenimiento de los accesos y con la iluminación, pero a simple vista el perímetro del penal federal es verdaderamente una boca de lobo. la avenida de acceso es de una oscuridad absoluta y las luminarias internas del penal asemejan a luciérnagas en la noche.
El campo interno, después de un doble vallado, y hasta el alambrado que separa de una ruta provincial está poblado de maleza seca a punto de arder y ya en el perímetro está rodeado de acequias que llevan agua constantemente y una zona montuosa impenetrable, que da a una ruta sin iluminación, la que conduce a distintos cruces de caminos vecinales, de fincas y rutas provinciales que llevan tanto hacia el norte, al este y al sur del departamento General Güemes.
El temor expresado por las presentes se debe a la posibilidad de fuga, pero también a que se sabe que en esa cárcel purgan condenas distintas personas ligadas a la trata de persona, y otros graves delitos federales conexos: lavado de activos y narcotráfico, entre otros, y esas relaciones hacen temer a las mamás de General Güemes.
El traslado mediático no conformó a los ciudadanos
Fuentes de Santiago del Estero informaron que el convoy con los detenidos por el caso Loan Peña, tras intentar judicialmente evitar el traslado a Salta finalmente fueron conducidos a un furgón de la Policía Federal que separó a los detenidos en el interior del mismo con guardias personales para evitar el contacto verbal entre ellos. El furgón partió fuertemente custodiado por varios transportes de la fuerza federal.
Con un grupo de uniformados fuertemente armados y una logística por detrás que incluyó seguimiento satelital y por drones el convoy partió de Goya hasta Resistencia, Chaco; luego prosiguió por ruta 16 e ingresó al territorio santiagueño por Quimilí. Prosiguió por la ruta del Mercosur, 89; Suncho Corral y tomó por la ruta 34, hasta arribar a la base de la Policía Federal, frente a Casa de Gobierno de la madre de ciudades.
Allí comenzó un show con tránsito cortado y periodistas y curiosos solo desde la vereda, vigilados. Los cinco presos descendieron con los rostros cubiertos. Todo fue filmado por los federales, por tierra y en aire por dos drones. Allí esperaron a que llegase personal federal de Tucumán. Así con esta nueva custodia partieron a las 23 hacia General Güemes a la que arribaron a las 5.20 de la mañana y a pesar de la hora y el frío fueron recibidos con alaridos de reproche.
La causa por la desaparición de Loan Peña hoy está en jurisdicción federal como supuesto secuestro y trata de persona y por el momento no hay nuevos detenidos.
En Santiago del Estero como en Salta, a los ciudadanos no les conformó el paseo de detenidos, exigieron la aparición de Loan Peña.
Detenidos: sin contacto entre ellos
Una fuente informó a El Tribuno que se estableció que los cinco detenidos que se alojaron ayer en el penal federal 3 estarán en celdas individuales hasta tanto disponga la justicia y que las mismas estarán separadas entre sí, por lo que se evitará primeramente el contacto con la población carcelaria actual y también que los encartados puedan compartir entre ellos cualquier tipo de contacto. Fuentes de Güemes aseguran que varios reclusos allí cuentan con celulares para comunicarse interna y externamente.