Publicaron una guía sobre salud ósea en personas trans y el impacto de la terapia hormonal

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La premisa desde la que partió el equipo de trabajo fue que la terapia de afirmación hormonal “podría estar asociada con alteraciones en la densidad mineral ósea / Foto: 123RF.

“La idea surge desde la Sociedad Argentina de Osteoporosis a partir del interés que genera la hormonización u otros tratamientos que se utilizan durante la afirmación de género y su impacto sobre el hueso” Rubén Abdala

“Es fundamental tener una buena salud ósea para prevenir complicaciones futuras como las fracturas por fragilidad” Rubén Abdala

Se confirmó que la terapia de afirmación hormonal para género femenino provocaría una pérdida de masa ósea mayor comparada con la del género.

Expertos convocados por lapublicaron una guía con recomendaciones para equipos de salud en relación al estudio de la masa ósea en personas trans y no binarias antes y durante la terapia hormonal de reafirmación de género y su impacto sobre el hueso “para contribuir a mejorar la atención y la calidad de vida de las personas transgénero”.Durante dos años, un grupo de profesionales con experiencia en la atención de personas trans de hospitales y clínicas públicas y privadas se reunieron para elaborar la guía, publicada a principios de este mes en la”La idea surge desde la Sociedad Argentina de Osteoporosis a partir del interés que genera la hormonización u otros tratamientos que se utilizan durante la afirmación de género y su impacto sobre el hueso”, introdujo a Télam el médico especialista en endocrinología y magíster en metabolismo óseo,, integrante del Instituto de Diagnóstico e Investigaciones Metabólicas (IDIM) y el, entre otras cuestiones, explicó Abdala.En estudios previos del IDIM y Hospital Durand,(personas cuya identidad de género coincide con el sexo asignado al nacer), aún sin haber comenzado una terapia de hormonización., es decir un estado de vida con menos deporte, indica la publicación, además de”Es fundamental tener una buena salud ósea para prevenir complicaciones futuras como las fracturas por fragilidad (osteoporosis)”, aseguró Abdala, y en este sentido, la pregunta que guió a la publicación fue “”.La premisa desde la que partió el equipo de trabajo fue que la terapia de afirmación hormonal “podría estar asociada con alteraciones en la densidad mineral ósea (DMO)”.En este sentido-un tratamiento que retrasa la pubertad-, además de aquellos que presenten factores de riesgo que afecten la salud ósea., al tiempo que “la terapia de afirmación hormonal (TAH) para género femenino provocaría una pérdida de masa ósea mayor comparada con la TAH en género masculino”.También para este colectivo, cuando tiene entre 15 y 43 años, luego de 12 a 24 meses de TAH, se observó un aumento de la densidad ósea en la lumbar en relación a los valores previos al tratamiento, aunque no se observaron cambios en los huesos de la cadera.En tanto,, pero posteriormente a la TAH se evidencióA su vez no se registraron cambios significativos en la densidad mineral ósea luego de 12 a 24 meses de tratamiento, aunque sí algunos estudios encontraron un aumento de este índice luego de los dos años, según consigna la publicación.Frente a los casos de baja masa ósea, el equipo recomendó adoptar las medidas de prevención de pérdida de masa ósea basadas en un consumo adecuado de calcio con la dieta (1.200 miligramos por día), mantener niveles de vitamina D superiores a los 30 nanogramos por mililitros y actividad física.Además,para “seguir las convenciones sociales y legales vigentes en nuestro país, respetando la identidad de género autopercibida”.”Para ello es importante capacitar al equipo de salud, desde que ingresa la persona (o sea desde el saludo de la recepción), aprender a llamar por el apellido, y en lugar de diagnóstico consignar ‘Ley 26.743’ eliminando la estigmatización subyacente”, detalló Abdala.Asimismo advirtió que “un dilema importante surge cuando se informa el estudio y el quipo solamente consigna el sexo asignado al nacer (varón o mujer) y no permite la modificación para el análisis”, frente a lo cual Abdala consideró “importante, redactar un informe como hoja principal donde se asigne la identidad de género”.Las y los participantes del estudio pertenecen al Hospital Carlos Durand, Hospital Nacional Profesor Alejandro Posadas, Hospital Doctor Teodoro Álvarez, Hospital Italiano, Sanatorio Allende de Córdoba; Centro de Medicina Reproductiva de Tucumán; Hospital General de Agudos José María Ramos Mejía, Hospital General de Agudos Doctor Juan Antonio Fernández.Se trata de Alberto Nagelberg, Rubén Abdala, María Larroudé, Vanina Farías, Mariano Garabito, María Balonga, Evangelina Giacoia, Silvia Karlsbrum, María Pavlov, Adriana Frigeri, Mirena Buttazzoni, Pablo Costanzo, Sebastián Suárez, Andrés De Benito y Verónica Pa.

Fuente: https://www.telam.com.ar/economia