Hay diversos anuncios que van en ese sentido, pero dos parten desde el propio riñón del Estado y están enfocados en reducir el gasto. Por un lado, se hizo público en los últimos días que la gestión nacional realizará auditorías de planes sociales con bajas automáticas y estudiadas para reducir la ayuda social; y por el otro, se efectuará un estudio de los bienes del Estado para realizar ventas de los que se consideren innecesarios.
Cómo será la auditoría del Estado para rematar bienes
Tal y cómo lo había informado El Cronista, esta auditoría de bienes era una de las primeras medidas que ya eran consideradas por el Gobierno a días de haber asumido.
El plan original es que cada área ministerial articule la propia radiografía de los bienes que le atañen a sus respectivas carteras. Todo esto será bajo la supervisión de la Jefatura de Gabinete, a cargo de Nicolás Posse , quien tiene dentro de su órbita a la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), el órgano clave que regula todo lo ateniente a los bienes públicos.
En el Boletín Oficial publicado semanas atrás se dio un paso clave para avanzar en esta auditoría, dado que se oficializó que Nicolás Pakgojz será quien detente la titularidad de la AABE . Se trata de un exfuncionario del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA); particularmente, fue jefe de Gabinete de la Secretaría de Desarrollo Urbano y de la Subsecretaría de Gestión Urbana. En esta última área coincidió con un extitular de la AABE (2019), Alfonso Crotto.
El nuevo presidente de la Agencia de Administración de Bienes del Estado, Nicolás Pakgojz.
En tanto, el vicepresidente de la agencia designado es Marcelo León Ugarte, hasta hace algunos días director general de Asuntos Jurídicos de esa misma entidad.
Desde Casa Rosada indican que la auditoría será una de las primeras cosas a implementar por parte de la Administración de Bienes del Estado . Si bien se había estipulado con que la fecha de cierre sea marzo, los nuevos titulares de la agencia arribaron días atrás y no hay un período claro.
En tanto, lo que se plantea es realizar un registro ordenado de los bienes del Estado mediante un relevamiento exhaustivo de los mismos en todos los puntos del país. “Se van a vender todos los muebles, terrenos, coches y edificios que no estén siendo utilizados” o sean consideradas prescindibles a mediano o largo plazo. El análisis posterior para determinar cuáles bienes se vende y cuáles no tomará un tiempo considerable, pero serviría para “seguir ajustando el déficit”, indicaron a este medio desde Presidencia semanas atrás.
Estas se harán mediante la típica Subasta Pública Electrónica de Bienes Inmuebles, el procedimiento en el cual el Estado realiza licitaciones o concursos públicos, privados o contrataciones directas, en donde se adjudica a la oferta económica más ventajosa. La de los muebles, en tanto, está más descentralizado y es menester de cada organismo .
Fuente: https://www.cronista.com/